MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
El diputado de CiU en el Congreso, Jordi Jané, aprovechó hoy su intervención en la Diputación Permanente del Congreso para arremeter contra el Gobierno central y el catalán por intentar "simular" que el acuerdo sobre la financiación autonómica está "cerrado" cuando, desde su punto de vista, no es así, porque las cifras que corresponden a Cataluña no están del todo claras.
"Me parecen muy bien las simulaciones que puedan hacer los distintos gobiernos, pero no hay no concreciones, no está cerrado", aseguró Jané en respuesta al portavoz de ERC, Joan Ridao, quien defendió la propuesta gubernamental y avisó de que su formación estará "vigilante" para que el acuerdo de financiación autonómica tenga su traducción en las leyes que habrán de pasar por el Parlamento para hacerlo efectivo.
Este intercambio de opiniones se produjo durante el debate de una petición de comparecencia registrada por el PP para que el vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, explique este verano en el Congreso cómo piensa afrontar el Gobierno la reforma de la financiación local, una solicitud que sólo obtuvo el apoyo de ERC.
Ridao defendió que tras haberse alcanzado un acuerdo sobre la financiación autonómica es el momento de que el Gobierno se ponga "manos a la obra" para reformar el "obsoleto y rígido" sistema por el que se rige la financiación local.
Este argumento llevó al representante de CiU a puntualizar que la propuesta del Ejecutivo sobre financiación local no está tan clara como parece en lo referente a Cataluña porque, pese a que el Gobierno de José Montilla se afana en concretar "hasta el último céntimo", esas cantidades no han recibido el aval público del Ejecutivo central.
SIN CIFRAS "RIGUROSAS"
"La financiación autonómica no está cerrada por mucho que gobiernos como el de Cataluña afirmen que hay cifras concretas y cálculos rigurosos", insistió Jané, quien recalcó que el Estatut prevé una negociación "bilateral" sobre esta cuestión.
Por su parte, en nombre del PSOE, la diputada catalana Meritxell Batet evitó polemizar y se limitó a señalar que el nuevo modelo de financiación autonómica ha visto la luz tras una "negociación compleja" que requería aunar "muchos intereses".
A su juicio, el resultado ha sido satisfactorio porque el futuro sistema implicará mejoras para todos los ciudadanos, puesto supondrá más inversiones para servicios sociales, garantizará mejor la cohesión y el equilibrio territorial.
