MURCIA, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
El fiscal delegado de Anticorrupción del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia, José María Alcázar, ha renunciado a su cargo apenas tres meses después de que fuera nombrado por el Pleno del Consejo Fiscal el pasado 19 de septiembre, según publica en su edición de hoy el diario 'El Faro' de Murcia.
Al parecer, se apuntan dos causas como posibles para esta decisión, por un lado las fuertes presiones recibidas desde la Fiscalía del TSJ, inmersa en la investigación de presuntos casos de irregularidades urbanísticas cometidas en la Región, y por otro las diferencias existentes con el fiscal jefe del TSJ, Manuel López Bernal.
Alcázar deja su puesto coincidiendo con el día en que la Fiscalía decidió abrir diligencias sobre otros dos proyectos, Novo Carthago y la adjudicación del puerto deportivo de San Pedro del Pinatar. Y es que, según el periódico, la marcha del fiscal Anticorrupción romperá la dinámica de trabajo de la Fiscalía hasta que se encuentre a un sustituto.
El nombramiento de Alcázar como fiscal Anticorrupción coincidió con los de Valencia, Almería, Cádiz y Sevilla, que se unían así a los ya existentes en Barcelona, Baleares, Alicante, Las Palmas de Gran Canaria, Tenerife y Málaga.
Tras el nombramiento de Manuel López Bernal como fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia, en enero de 2005, relevando en este cargo a Guillermo Sena, la Fiscalía ha iniciado diligencias en más de diez casos, entre ellos la compraventa de la finca de Lo Poyo, la actuación del ex jefe de Planeamiento del Ayuntamiento de Murcia o la investigación al alcalde de San Javier.
Los juzgados también están trabajando en desentrañar las ramificaciones de la 'Operación Malaya' y sus posibles vinculaciones con Los Alcázares.
