El fiscal pide 8 años de cárcel para un guardia civil acusado de intentar disparar contra un conocido

Actualizado: jueves, 10 julio 2008 20:15

VALENCIA, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

El ministerio fiscal reclamó hoy en la sección cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia una pena de ocho años de cárcel para un guardia civil acusado de intentar disparar, hasta en dos ocasiones, contra un conocido suyo con el que había discutido. El hombre negó que pretendiera disparar a la víctima, aunque reconoció que le golpeó en varias ocasiones con el arma.

El guardia civil explicó, durante su declaración ante el tribunal, que el día 5 de abril de 2006, cuando se encontraba atendiendo un accidente de tráfico en el municipio valenciano de Gandia, pasó por su lado un conocido suyo --con quien había quedado en varias ocasiones junto a sus esposas-- con un camión, y le hizo un "gesto despectivo" desde la ventanilla.

Él no le dio importancia y, concluida la asistencia de tráfico, se dirigió junto con su compañero a otro incidente. En el trayecto observó el camión del conocido estacionado en la puerta de un bar, con lo que decidió parar para pedirle explicaciones por su actitud. Intentó avisar a su compañero de la parada, pero había una "zona negra de comunicación", con lo que le fue imposible.

Una vez allí, según su versión, entró al local y le pidió que salieran, que tenía que hablar con él. Fuera, empezaron a discutir y, dijo, la víctima le agarró por la cintura, con lo que pensó que pretendía quitarle el arma. Por ello, la desmontó y tiró los cartuchos al suelo.

Esta versión no coincide con la de la víctima y la del ministerio fiscal, que afirman que éste, tras decirle que le estaba "arruinando la vida", desenfundó su pistola reglamentaria, le apuntó directamente a la cabeza y apretó el disparador. Sin embargo, el proyectil no llegó a salir por estar activado el seguro manual. Lo intentó una segunda vez, repitiendo la misma operación, pero volvió a caer al suelo otro cartucho.

A continuación, según el fiscal, el procesado golpeó con la pistola a la víctima en la cabeza, hasta que se cayó al suelo, desde donde le dio patadas. Como consecuencia, la víctima sufrió fracturas craneales, por las que precisó para su curación un tratamiento médico quirúrgico posterior a la primera asistencia. En total, tardó en recuperarse unos 40 días, ocho de los cuales fueron hospitalarios. La víctima aseguró que ni tocó ni intentó quitar el arma al acusado.

Tras la agresión, que el acusado sí reconoce, aunque afirma que no sabe por qué ni cómo sucedió, y se disculpó por ello, cogió su motocicleta y se trasladó hasta la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Gandia, desde donde fue acompañado por funcionarios hasta el cuartel de la Guardia Civil.

LES "TENÍA MANÍA".

Por su parte, la mujer de la víctima declaró ante el tribunal que un mes y medio antes de que sucedieran los hechos, se cruzó con la mujer del acusado, con quien todavía mantenía una amistad, y le advirtió de que su marido les "tenía manía" y le dijo que tuvieran "cuidado", afirmó.

Ante estos hechos, el ministerio fiscal pide una pena de ocho años de cárcel para el guardia civil por un delito de asesinato; otros 10 años de prohibición de aproximación y de comunicación con la víctima; y que pague una indemnización de 5.660 euros por las lesiones y secuelas padecidas, y a la Generalitat valenciana otros 1.704,32 euros, cantidad que supuso la atención de sus lesiones en un centro hospitalario público.