Presidente Hungría propone "estrechar nuevos lazos para la economía, la industria o los servicios" desde la relación universitaria
MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, destacó hoy el "ejemplo" que el pueblo húngaro supuso para el resto de países de la órbita soviética en el cambio de régimen, cuyo vigésimo aniversario se celebra este año, durante la entrega de las Llaves de Oro de la capital al presidente de la República de Hungría, László Sólyón, en la Casa de la Villa.
El dirigente magiar llegó puntual a la plaza de la Villa, donde ya lo esperaba Gallardón acompañado por el teniente de alcalde y delegado de Hacienda, Juan Bravo, así como por los portavoces de los tres grupos municipales: Manuel Cobo (PP), David Lucas (PSOE) y Ángel Pérez (IU).
Para rendirle honores, se convocó a la Unidad Central de Seguridad de la Policía Municipal, a la Banda y al Escuadrón, montado a caballo. Tras realizar el paseo de honor y saludar a los mandos, Sólyón firmó en el Libro de Honor del Consistorio en la Sala Goya, antes de pasar al Salón de Plenos.
En su discurso, Gallardón recordó "el momento de mayor significación de Hungría en la historia contemporánea" y "un hito temprano en el camino hacia la libertad de media Europa" como fue la revolución de 1956.
"El ejemplo que el pueblo húngaro dio entonces con su levantamiento, su lucha por la libertad y la independencia nacional, así como el sacrificio de muchos de sus ciudadanos, constituye una de las epopeyas más trágicas, generosas y emotivas de la historia contemporánea de nuestro continente, mostrando el sendero de la libertad a todos los pueblos de Europa", afirmó el regidor.
PAÍS DE ARTES Y CIENCIAS
Además, subrayó que Sólyón es "el tercer Jefe de Estado" magiar que visita la capital, lo que a su entender "pone de manifiesto de forma inequívoca la intensidad de las relaciones entre Madrid y Hungría". También subrayó el "fuerte carácter propio" del pueblo magiar y su "implicación en la construcción de la Europa democrática".
En esta línea, el regidor madrileño recordó la gran "creatividad cultural y científica" de los húngaros tanto en el campo de la música (Ferenc Liszt, György Ligeti, Béla Bartók), como en la literatura (Sándor Marai, Péter Nádas y Imre Kertész) como en las ciencias (Edward Teller o John von Neumann).
Finalmente, Gallardón retrató a Sólyón como un "hombre que es un ejemplo de esa bravura y ese compromiso" y que "contribuyó notablemente primero a la transición política hacia la democracia y luego, como presidente del Tribunal Constitucional, al fortalecimiento de los derechos y libertades" con "una dedicación personal a la defensa del medio ambiente".
"Somos una ciudad que ha modernizado sus servicios e infraestructuras en todos los ámbitos, por lo que hoy podemos poner toda nuestra experiencia a disposición tanto de la capital húngara como de las demás urbes de su país", concluyó, antes de hacerle entrega de las Llaves de Oro de Madrid que, cuando Sólyón quiso mostrar a la prensa, se le cayó de la cajita donde va guardada, provocando una tímida sonrisa del mandatario húngaro.
FORTALECER LAZOS
Por su parte, Sólyón se mostró convencido de que, "partiendo de las relaciones entre universidades, en los ámbitos de la ciencia, la investigación y la innovación, se pueden estrechar nuevos lazos para la economía, la industria o los servicios".
Preciamente, el objetivo de su visita oficial a España, en el que se enmarca el recibimiento de hoy en la Casa de la Villa, se debe a su intención de "analizar las tareas relacionadas con la Presidencia de la Unión Europa", en la que espera que se pueda trabajar en "contenidos". "Mucho dependerá de cómo moldeemos y configuremos el nuevo marco institucional", avisó.
Así, puso como ejemplo de sus prioridades en este sentido la ampliación y la política de vecindad, garantizar la seguridad en los Balcanes occidentales y su perspectiva europea, la protección de los derechos de las minorías, la lucha contra la inmigración ilegal o la cohesión de las regiones menos desarrolladas. "Se abren muchas posibilidades para la cooperación entre autoridades locales y ciudades hermanadas", añadió.
Finalmente, destacó las "buenas relaciones" entre Hungría y España y la "fuerte tradición histórica" que une a ambas naciones ("Los españoles lucharon por la liberación de Hungría de los invasores turcos en 1686", recordó), y subrayó que los objetivos y expectativas de españoles y húngaros sobre el futuro de la UE "son similares".
Para despedirse, bromeó con que ahora que tiene las Llaves de Oro de Madrid vendrá "más a menudo". "¡Tengan cuidado!", avisó, y concluyó haciendo entrega a Gallardón de la Medalla de San Esteban, el primer rey de Hungría hace más de mil años, "en señal de respeto y amistad".
