Acusa a ERC y NECat de esconder que Ernest Maragall dejará el cargo a media legislatura
BARCELONA, 28 May. (EUROPA PRESS) -
El eurodiputado electo de UDC Francesc Gambús ha aventurado este miércoles que el "enfrentamiento programático" entre CiU y ERC será cada vez más importante tras la victoria de los republicanos en las elecciones europeas, pero no en el plano del autogobierno catalán.
"Podemos llegar a la paradoja que en el ámbito nacional nos vayamos entendiendo cada vez más pero que, en cambio, el enfrentamiento programático sea cada vez más importante. Tiempo al tiempo", ha pronosticado en un artículo en su blog personal recogido por Europa Press.
Según Gambús, CiU y ERC, pese a sus diferencias "que según quien pueden llegar a ser muchas", están mucho más cerca en todo lo relativo a Catalunya que en el eje izquierda-derecha.
Si hasta ahora en la dialéctica entre ambos había predominado el debate sobre el grado de "pureza en el aspecto nacional" y el debate ideológico había quedado en segundo plano, ha cuestionado que esto se mantenga mucho tiempo más tras el escenario abierto que depararon las europeas.
También ha aprovechado para criticar que el eurodiputado electo de ERC Ernest Maragall deje su escaño a media legislatura para dejar paso al número tres de la lista, Jordi Solé, y ha censurado que ERC y NECat no explicaran un hecho "tan relevante" a la ciudadanía.
Ha reprochado tanto esta actitud como la posibilidad de que, aunque creyeran que debían explicarlo, no lo hicieran por posibles intereses políticos y electorales.
Gambús ha confrontado la posición de ERC y NECat con las explicaciones que ha dado, sobre todo a instancia de ambas formaciones, sobre su integración al PP europeo si salía elegido: "Podía haber mareado la perdiz y huir de un debate que algunos me lo querían hacer incómodo, pese a que no me ha incomodado nunca".
DERROTA DEL PSC
Para Gambús, la "gran derrota" del PSC explica en parte la victoria de ERC porque votos de izquierdas y catalanistas de los socialistas han ido a los republicanos, aunque no se ha atrevido a atribuirlo al 'efecto Maragall', sin restarle tampoco importancia.
Sobre que CiU pesque pocos votos entre los socialistas, ha admitido que han dejado ser "creíbles" para los electores del centro izquierda, aunque ha valorado que han aguantado bastante bien pese a ser los que gobiernan.
