BILBAO, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
El expresidente del Gobierno con el PSOE, Felipe González, pidió hoy el voto para su formación porque, según dijo, el Gobierno de Zapatero "lo ha hecho bien, y es el único que abre la esperanza para todos". Asimismo, reclamó el apoyo a los socialistas para que la derecha "aprenda a perder y, así, algún día sabrán ganar".
González intervino esta tarde en el pabellón de La Casilla, en Bilbao, abarrotado de simpatizantes socialistas que le recibieron entre aplausos, apretones de manos y que corearon su nombre, en el día en que cumple 66 años.
En su intervención, que fue interrumpida con aplausos en varias ocasiones por los asistentes, que portaban ikurriñas y banderas del PSOE, González defendió la política económica, social, exterior y antiterrorista del Ejecutivo Zapatero, a quien reprochó que "no ha explicado suficientemente las muchas cosas que ha hecho".
En el apartado antiterrorista, señaló que Zapatero hizo una apuesta "de buena fe, pero no se descuidó" y añadió que ETA está derrotada "políticamente y muy agotada". "A ETA la tolera cada vez menos gente y saben que pueden matar mañana, pero saben que no van a obtener más que repugnancia de sus propios ciudadanos", añadió.
En este sentido, indicó que los terroristas "saben que están derrotados y cada vez más aislados" y lamentó que se hable de ellos "más que nunca porque la oposición ha estado en manos de irresponsables".
Tras señalar que Zapatero lo ha "intentado y no lo ha conseguido, pero ni Alonso ni Rubalcaba han bajado la guardia", aseveró que en el 98 sufrió "porque se bajaron los brazos, pero nos callamos para no dar ventaja a los violentos".
A lo largo de su alocución, González arremetió en varias ocasiones contra el número 2 del PP por Madrid, Manuel Pizarro, del que dijo que no ha sido un fichaje "caro" para el PP, "lo caro va a ser el finiquito". "Como lo hagan fijo del plantilla, el finiquito arruinará al PP", ironizó.
Asimismo, señaló que Pizarro fue "vapuleado" por Pedro Solbes en el debate celebrado en televisión y le reprochó que no sepa cuánto ha subido la bolsa de la compra "porque él nunca ha ido al supermercado, y se aprendió el precio de las cerezas, pero no sabe que ahora no es la época, y que tenemos que traerlas de Chile".
En esta línea, acusó a la derecha de "no creer en nada" y de intentar "meter el miedo" con la inmigración. "No creen en la igualdad de oportunidades", indicó, para reprocharles que "abusen del miedo a la inmigración, cuando los usan en su propio beneficio".
González fue precedido en el estrado por el secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, quien defendió el "derecho a convivir" frente al "derecho a decidir invocado por los nacionalistas. "Unos quieren imponer sus ideas y yo hablo de acuerdo entre diferentes para hacer país, para acabar con los frentes; ante los que se envuelven con las banderas nacionales, yo levanto la bandera blanca de la paz contra el terrorismo", destacó.
Asimismo, denunció el discurso sobre los inmigrantes del PP "cercano a la xenofobia" y les recordó que éstos se dedican a "cuidar de sus hijos". Aludiendo al elegido presidente de la Conferencia Episcopal, señaló que "más caridad cristiana y menos mítines en la Plaza de Colón".
Por otra parte, se refirió a la "niña de Rajoy" para señalar que ésta estará "horrorizada si gana el PP, porque le van a imponer su moral y religión, no podrá elegir libremente su sexualidad, se tendrá que casar por la iglesia como Dios manda y estará discriminada en el trabajo".
"La conclusión es que la niña votará a Zapatero para ser una mujer libre. Más vale que no sea negra, dependiente, lesbiana o pobre, porque con Rajoy no tendrá sitio en este país. Cabemos todos en este país", aseguró.
El mitin contó también con las intervenciones del los candidatos del PSE-EE por Bizkaia, Lentxu Rubial y Eduardo Madina, así como con la lectura del manifiesto de apoyo a Zapatero suscrito por 25.000 personas que fue leido por el actor Alvaro de Luna.
Frente al pabellón de la Casilla se apostaron medio centenar de afectados de Forum-Afinsa, quienes corearon lemas en contra del Gobierno Zapatero, registrándose algún enfrentamiento verbal con simpatizantes socialistas que iban al mitin.
Un centenar de metros más alejados se encontraban un centenar de miembros de la izquierda abertzale, custodiados por la Ertzaintza y encabezados por el histórico dirigente de Herri Batasuna, Tasio Erkizia, quien defendió la abstención el día 9 para "luchar por la independencia".
