IU acusa a Mena de descrédito a las FAS y pregunta por qué no fue cesado tras su "arenga golpista" en octubre de 2005

Actualizado: lunes, 25 febrero 2008 16:40

Reclama saber quién le apoyaba y pide el listado de llamadas que hizo después de su discurso contra el Estatut en la Pascua de Sevilla

MADRID, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -

Izquierda Unida considera que el teniente general retirado José Mena Aguado ha incurrido con su libro 'Los militares. Los límites del silencio' en sendos delitos de descrédito a la imagen de las Fuerzas Armadas y de injurias a sus mandos, además de "revelación de secreto, subversión del orden constitucional" e "inclinación por una acción política", según consta en la denuncia presentada ante la institución que dirige Cándido Conde Pumpido.

La formación liderada por Gaspar Llamazares reclama en su denuncia, a la que tuvo acceso Europa Press, que la Justicia aclare por qué no fue cesado "de modo fulminante" después de plantear ante la cúpula del Ejército en octubre de 2005 su "arenga golpista" y solicita que se indague sobre los mandos que le apoyaban y se facilite el listado de sus llamadas después de su discurso de la Pascua Militar de 2006 en Sevilla, que le valió el arresto y el cese por sus críticas al Estatuto catalán.

"¿Por qué los miembros del Consejo Superior del Ejército presentes en la reunión celebrada el 26 de octubre de 2005 por este organismo permitieron que el teniente general Mena acabara su arenga golpista y no fuera destituido de modo fulminante", se pregunta la formación de izquierdas.

Según el relato del propio general, en la reunión del Consejo Superior del Ejército de octubre de 2005, el entonces jefe de la Fuerza Terrestre del Ejército alertó a sus compañeros tenientes generales sobre las consecuencias que podía tener en el Ejército la posibilidad de que el Estatuto de Cataluña se aprobara tal y como estaba redactado y expresó la necesidad de que la Corona, "apoyada firmemente por las Fuerzas Armadas, salvaguardara "la unidad de España", si "los políticos" la ponían "en peligro" y "la Justicia" no intervenía.

IU estima además que el general Mena incurrió en su libro y en su discurso de la Pascua Militar de 2006 en Sevilla en un delito de "descrédito" de la imagen de las Fuerzas Armadas, al trasladar "una imagen distorsionada" de las mismas, "situándolas donde no están y dando la impresión falsa e interesada y apocalíptica de que la mayoría de los mandos y soldados manifiestan posiciones contrarias al Estatuto de Cataluña, al supuesto ataque al concepto de Nación, al régimen lingüístico de Cataluña y a la descentralización autonómica de la Justicia". A su juicio, el ex jefe de la Fuerza Terrestre "empaña" la imagen de las Fuerzas Armadas y "desacredita" al Ejército de Tierra "en una parte importante de la ciudadanía, con el consiguiente perjuicio para la cohesión de la Nación".

Cesado por el Gobierno en enero de 2006 por sugerir en su discurso de la Pascua Militar de 2006 en Sevilla que el Ejército podía intervenir si el 'Estatut' rebasa la Constitución, el general Mena revela en 'Los militares. Los límites del silencio' que en aquella reunión alertó a los tenientes generales sobre las consecuencias que podía tener en el Ejército la posibilidad de que el Estatuto de Cataluña se aprobara tal y como estaba entonces redactado y expresó la necesidad de que la Corona, "apoyada firmemente por las Fuerzas Armadas, salvaguardara "la unidad de España", si "los políticos" la ponían "en peligro" y "la Justicia" no intervenía.

Mena relata en su obra, recogida por Europa Press, que, ante la posibilidad de que el Estatut fuera aprobado con modificaciones que no resolvieran "los problemas" que afectaban directamente a las Fuerzas Armadas y el Gobierno lo aceptara, "alguien" tendría que "decir algo" y responde a su propio interrogante con la afirmación de que la Corona debería tomar la palabra con el apoyo de las Fuerzas Armadas.

"Pero, ¿quién es ese alguien?. Por supuesto que no puede ser un militar. La Justicia no pasa por su mejor momento. Entonces, ¿quién?. Afortunadamente, contamos con una institución que salvó la democracia el 23F. Llegado el caso, tendrá que ser esa misma institución, respaldada firmemente por las Fuerzas Armadas, la que salvaguarde la unidad de España si los políticos la ponen en peligro y la Justicia no interviene", sostuvo el general ante toda la cúpula del Ejército, reunida en el Consejo Superior.