De Juana.- Víctimas extremeñas lamentan la decisión y acusan al Gobierno de "fijarse más" en los terroristas

Actualizado: sábado, 3 marzo 2007 13:58

Chamizo recuerda que las dos víctimas extremeñas de De Juana eran "jóvenes que empezaban su vida y que él se la arrebató"

MÉRIDA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo de Extremadura, Maribel Chamizo, señaló hoy que la decisión del Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero de conceder la prisión atenuada a Iñaki de Juana Chaos ha sido acogida con "tristeza" en el colectivo, y criticó el hecho de que el Gobierno "se fije más en los terroristas que en las víctimas".

En declaraciones a Europa Press, Chamizo insistió en que les "duele mucho el alma" tras el traslado del preso etarra al País Vasco y defendió que "la humanidad y la justicia" la tendría que tener el Ejecutivo con las víctimas del terrorismo, que son quienes sufren "el zarpazo de ETA".

Para Chamizo, la huelga de hambre de 114 días emprendida por De Juana Chaos responde a una decisión personal, por lo que no entiende cómo el Gobierno ha podido tomar la decisión de trasladarlo al País Vasco. "De Juana sabrá lo que hace, no es una enfermedad en fase terminal para mandarlo a casa, el Gobierno lo debería haber dejado en prisión", sentenció.

Por otro lado, recordó que De Juana Chaos es "un asesino de 25 personas" y se lamentó de que él no tuviera compasión a la hora de acabar con sus vidas. "Él no le preguntó a sus víctimas si querían hacer huelga de hambre sino que los mató directamente", dijo indignada.

Dos de esos 25 asesinados por el 'Comando Madrid' al que pertenecía De Juana Chaos eran extremeños. Carmelo Bella Álamo, natural de Granja de Torrehermosa (Badajoz), trabajaba como Guardia Civil y murió con 22 años en julio de 1986 en el atentado de la plaza República Dominicana en Madrid. En ese mismo atentado, falleció también su compañero Antonio Lancharro Reyes, natural de Monesterio, con 21 años de edad.

"Jóvenes con 20 años, que estaban empezando su vida y se la arrebató porque le dio la gana", concluyó la representante de la AVT extremeña, Maribel Chamizo, cuyo marido fue asesinado en 1983 en Guipúzcoa también a manos de ETA.