MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Primera Instancia número 1 de Marbella ha rechazado retirar de circulación el libro "La conspiración, el último atentado de los GAL", escrito por el ex subcomisario de Policía José Amedo, como solicitaba en una demanda el industrial vasco José Ramón Gómez-Salazar Gracia, quien consideraba que el libro violaba su intimidad y su honor y, al identificarlo y hacerle reconocible por ETA, ponía en "grave peligro" su integridad física.
En un auto al que ha tenido acceso Europa Press, el juzgado rechaza la medida cautelar interesada por Gómez-Salazar y argumenta que "mal puede protegerse" su integridad física al secuestrar la publicación, puesto que cuando hizo su petición, el libro ya se había puesto a la venta y cualquier persona habría podido acceder a él.
Es más, señala la resolución, si el libro fuese secuestrado, se le daría una "publicidad inusitada" y la identidad del demandante llegaría aún a más audiencia, "que es precisamente lo que desea que no suceda".
En cuanto a la supuesta vulneración de sus derechos al honor y a la intimidad, el juzgado considera que las libertades de expresión y de información "gozan de una situación preferente" frente a ellos, y subraya que "no puede considerarse que exista una apariencia de buen derecho en la medida suficiente para decretar una medida judicial de tanta transcendencia" como la retirada de circulación del ejemplar.
En el auto se recogen las alusiones a Gómez-Salazar que aparecen en el libro de Amedo, que se limitan a dos de sus páginas, en una de las cuales se señala que el padre del industrial recibió una carta de ETA solicitándole el pago del "impuesto revolucionario". Según el demandante, en la otra página, Amedo "insinúa" que Gómez-Salazar pertenecía a los GAL, porque asegura que el industrial conocía datos sobre el asesinato del dirigente de HB Santiago Brouard en 1984, que posteriormente fue reivindicado por los GAL.
IDENTIDAD YA CONOCIDA POR ETA
La defensa de José Amedo y de la editora del libro, Ediciones Espejo de Tinta, se oponían a la medida solicitada por Gómez-Salazar pues consideraban que en la publicación no se utilizaban "expresiones injuriosas o vejatorias", y su identidad "ya era suficientemente conocida por la banda ETA en los años ochenta".
Amedo arranca su libro "La conspiración, el último atentado de los GAL" relatando sus comienzos en el Servicio de Información de la Jefatura Superior de Policía de Bilbao, donde logró crear una eficaz red de colaboradores-confidentes en el entorno de la banda terrorista ETA. Fue precisamente esa experiencia la que lo abocó a jugar un papel destacado en la creación de los GAL.
Este ex policía, sentenciado en 1991 a 108 años de cárcel por seis delitos de asesinato frustrado, asociación ilícita, falsificación de documentos de identidad y otros delitos relacionados con los Grupos Antiterroristas de Liberación, fue encargado por sus superiores de crear una estructura delictiva capaz de realizar actividades terroristas en el sur de Francia con el objetivo de presionar a las autoridades francesas y obligarlas a colaborar en la lucha antiterrorista.
