VITORIA, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Patxi López advirtió que no permitirá "ningún fraude" y que gestionará la cosa pública "con justicia, equidad y honradez" porque "no podemos dar pie a ningún equívoco". "Quiero que todos tengamos los bolsillos de cristal; nadie ha venido a este gobierno para hacerse rico", subrayó.
López se dirigió de esta forma a los altos cargos del Gobierno vasco a los que reunió hoy en Lehendakaritza para exponer las directrices que deberán regir la conducta de los miembros del nuevo Ejecutivo. "Todos pertenecemos al mismo Gobierno y lo que cada uno vaya a hacer afectará en lo bueno y en lo malo a todo el conjunto", subrayó.
El lehendakari recordó que se trata del primer Gobierno vasco socialista, por lo que "se trata de una enorme oportunidad para demostrar a todos los ciudadanos que han hecho bien en confiar en nosotros" y explicó que los principales objetivos serán hacer frente al terrorismo de ETA y anular todos los espacios de impunidad; combatir la crisis económica con el diálogo social; modernizar el país; invertir en Educación y Sanidad; ampliar las políticas sociales; y buscar la igualdad de la sociedad vasca.
Asimismo, resaltó que el 'cambio en Euskadi' conlleva una forma "distinta" de gobernar porque "la gente de izquierdas tenemos un concepto más altruista de lo público". Al respecto, advirtió que no permitirá "ningún fraude" en este terreno y que gestionará la cosa pública "con justicia, equidad y honradez" porque "no podemos dar pie a ningún equívoco".
López recordó que el PSE reclamó desde la oposición "una política de bolsillos de cristal para los cargos públicos que desde el gobierno vamos a poner en práctica". "Quiero que todos tengamos los bolsillos de cristal; nadie ha venido a este gobierno para hacerse rico", subrayó.
Por ello, afirmó que todos los cargos deberán cumplir "de forma escrupulosa" la normativa de compatibilidades, porque "todos debemos de tener claro que hemos venido al gobierno en un acto de servicio a la sociedad vasca", insistió.
SITUACIÓN "DIFÍCIL"
Por otro lado, reconoció que el PSE ha llegado al gobierno en una situación "difícil" por la actual crisis económica, que se suma a que "el anterior gobierno ha comprometido una parte importante de los recursos presupuestarios". "Nos han puesto lo difícil aún más difícil", indicó.
Sin embargo, defendió que durante los primeros 30 días de gobierno el Ejecutivo socialista está llevando "un ritmo frenético, por mucho que algunos digan lo contrario". Al respecto recordó los acuerdos para ampliar los fondos de emergencia social, reuniones con sindicatos y empresarios, con Eudel y los diputados generales o los cambios en el departamento Interior, entre otros."Todo ello en sólo 30 días; los que dicen que no hacemos nada deben estar sordos y ciegos", reiteró.
En este sentido, López consideró que "lo más importante" de su acción de gobierno en el primer mes de mandato "ha sido mantener la normalidad institucional en Euskadi" porque "ningún servicio público ha dejado de funcionar".
GOBIERNO AUSTERO
El lehendakari apostó también porque el Ejecutivo compagine "la austeridad extrema en gastos no necesarios con fuertes inversiones generadoras de empleo y de valor añadido".
Por ello, pidió a todos los miembros del Gobierno que realicen un "repaso" por los presupuestos "para conseguir recursos que consigan llevar a la práctica la inversión en un futuro". "La acción pública se debe caracterizar la austeridad, justicia y equidad; cada euro que gastemos debe ser usado de manera eficaz", defendió.
Además, defendió que la "transparencia" deberá estar presente en la gestión. Al respecto, afirmó que "todos los actos públicos y de gobierno deben ser y serán públicos porque no tenemos que ocultar nada de lo que hagamos. Podemos equivocarnos alguna vez, pero cuando pase lo reconoceremos y rectificaremos, pero no lo vamos a ocultar". "Todos tenéis mi apoyo personal y mi más absoluta confianza pero os advierto que seré exigente con todos", concluyó.
