VITORIA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Patxi López, advirtió hoy de que el Gobierno vasco "va a combatir a los grupos totalitarios y fascistas tengan el signo que tengan". Además, se mostró "ofendido" por quienes cuestionan su compromiso con la persecución de los ataques del grupo ultraderechista Falange y Tradición, que recientemente reivindicó 25 sabotajes y actos amenazantes.
López respondió hoy en el pleno de control del Parlamento vasco a una interpelación de la portavoz de Aralar, Aintzane Ezenarro, en la que se le pedía explicaciones por "el incomprensible silencio" del Gobierno vasco ante el comunicado de Falange y Tradición en el que este grupo asumía los citados ataques como "bienvenida" al nuevo Ejecutivo vasco.
El debate de hoy se produjo después de que la Cámara vasca aprobara ayer una iniciativa de rechazo a los ataques y amenazas de Falange y Tradición, en la que se insta al Departamento de Interior del Gobierno vasco a seguir actuando con medidas "firmes y efectivas" ante los ataques violentos.
El lehendakari recordó que el Ejecutivo ha investigado los ataques --como las pintadas amenazantes contra el supuesto miembro de ETA Arkaitz Goikoetxea o el envío de una bala por correo a la última txupinera de las fiestas de Bilbao, Sonia Polo, hermana de un preso de ETA-- y que los ha condenado públicamente.
"CONNIVENCIA"
Por ese motivo, y tras subrayar que "el Gobierno en ningún momento ha estado inactivo" ante estas acciones, advirtió de que el Ejecutivo "no va a permitir que nadie use la violencia y amenace las libertades". "Nada de silencio ni equidistancia; la actuación ha sido firme e inmediata", manifestó, para añadir a continuación que no va a "permitir" que "se deje caer que hay una especie de connivencia de este Gobierno con un grupo ultraderechista".
López se dirigió a Ezenarro para advertirle de que "no le voy a tolerar este insulto, ni como lehendakari ni como miembro del Partido Socialista, que se ha dejado la piel en este país en defensa de las libertades".
El lehendakari recordó que es "hijo y nieto de una familia duramente represaliada por una dictadura de la que este grupo --Falange-- es heredero". Por ese motivo, aseguró que este tipo de interpelaciones le "ofenden personalmente e insultan a la memoria de miles de militantes socialistas que sufrieron la represión franquista".
Asimismo, y tras rechazar sentirse "aludido por un grupo ultraderechista que dice darme la bienvenida", avisó de que el Gobierno vasco ""va a combatir a los grupos totalitarios y fascistas tengan el signo que tengan".
Por su parte, Ezenarro lamentó el "silencio" del Ejecutivo ante el comunicado de "bienvenida" de Falange y Tradición. "Nos debe una explicación a todos los ciudadanos, si no podría pensarse que el Gobierno no actúa igual ante todas las violencias", afirmó.
