MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Congreso, Manuel Marín, llamó hoy al orden por dos veces a la diputada del PP Ana Belén Vázquez, que había pedido una rectificación al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras mantener con él una agria disputa en la sesión de control al Gobierno en la Cámara Baja.
Tras finalizar las preguntas de control, Vázquez pidió la palabra con la intención de quejarse porque el titular de Interior había tildado de "miserable" su intervención, centrada en una retahíla de reproches sobre la política antiterrorista del Ejecutivo. Entre otras cosas, Vázquez había afirmado que Batasuna es ETA y que sigue actuando "amparada" por el Gobierno.
Cuando Marín le concedió la palabra para que explicase el motivo por el que la había solicitado, Vázquez señaló que lo que demandaba era que el ministro retirase el adjetivo "miserable" del Diario de Sesiones.
Marín admitió que el debate entre Vázquez y Rubalcaba había sido "áspero", pero dijo no apreciar ningún elemento que hiciese necesario conceder un turno de alusiones a la parlamentaria 'popular'. Eso sí, le ofreció la posibilidad de plantear formalmente una petición para qué él estudiase la conveniencia o no de suprimir el polémico término del Diario de Sesiones.
DIPUTADA "REINCIDENTE".
El presidente del Congreso dio paso al siguiente punto del orden del día pero, ante el malestar expresado por la diputada del PP desde su escaño, decidió llamarla al orden, conminándola a respetar su decisión. "Respete la decisión del presidente, es usted muy reincidente en esto", le espetó.
"Sabe usted cuál es el procedimiento para solicitar eventualmente la retirada de una expresión que usted juzgue excesiva. Diríjase a él y yo lo estimaré o no. Mientras tanto le ruego que respete al presidente. Es un ruego que le hago", agregó, sin ocultar su enfado.
A continuación, Marín volvió a dar paso a las interpelaciones, pero nuevamente las quejas de la diputada del PP le llevaron a retomar el asunto. "Señora Vázquez, le llamo al orden por segunda vez. Si tuviera que llamarle por tercera vez ya sabe usted lo que esto supone", le advirtió recordándole que tres llamadas al orden seguidas implican automáticamente la expulsión del hemiciclo.
Tras este último aviso, Vázquez cejó en su protesta y el diputado del PNV, Emilio Olabarría, pudo tomar la palabra para defender la interpelación presentada por su grupo.
