Contrasta con las acusaciones de agresión y trato racista de agosto que provocaron una crisis en la frontera con Melilla
MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Marruecos ha felicitado a España ante Naciones Unidas por la integración de los inmigrantes y por la lucha contra el racismo y la xenofobia. Así queda recogido al informe, al que ha tenido acceso Europa Press, que ha prepado el Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal que se ha realizado de España en el 15 periodo de sesiones del Consejo de Derechos Humanos, cuyas jornadas de trabajo han tenido lugar durante el mes de septiembre y han concluido el pasado viernes.
Las afirmaciones contrastan con las acusaciones y quejas que dirigió Marruecos a España a lo largo del mes de agosto pasado, cuando acusó a la Policía y a la Guardia Civil de haber agredido y dado trato racista a nacionales del reino alauí en los puestos fronterizos de Melilla. Unas quejas que provocaron una crisis en la frontera, que no se solucionó hasta que viajaron a Marruecos el director general de la Policía y la Guardia Civil y después el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
En los informes que realiza Naciones Unidas sobre cada país que examina en la Comisión de Derechos Humanos se producen numerosas aportaciones de los países que están interesados en comentar lo que consideran oportuno.
En el caso del informe sobre España, con el que ha trabajado Naciones Unidas en este periodo de sesiones, Marruecos ha realizado una aportación en la que "felicita" a España por la "integración de los inmigrantes y la protección de los derechos de lso trabajadores migratorios, así como por su lucha contra el racismo y la xenofobia".
Además, el reino alauí "elogió" las medidas destinadas a encontrar soluciones duraderas para los refugiados y preguntó qué medidas adoptaría el Gobierno español para "reforzar la eficacia de su nuevo Plan Estratégico Nacional de Infancia y Adolescencia".
Estas consideraciones contrastan con las quejas que trasladó el Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí el pasado mes de agosto a España en las que reclamaba "respuestas precisas" al Ejecutivo español en relación con supuestos incidentes "racistas" courridos en la frontera con Melilla y en los que, según denunciaba el reino alauí, se habrían visto envueltos efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
De hecho, Marruecos denunció en cuatro notas un total de seis incidentes violentos que habrían afectado a 17 marroquíes e incluso se quejaron de que las versiones que daba España en relación con estas denuncias diferían entre las que citaban la apertura de investigaciones, las que hablaban de "malentendidos" y otros "no oficiales" que consideraban justificadas las agresiones a las que aludía Marruecos.
Estas quejas estuvieron acompañadas de protestas de asociaciones civiles marroquíes en la frontera con Melilla, con pancartas insultantes hacia las mujeres policía españolas, así como de boicots a la entrada de productos en la ciudad autónoma. Finalmente se cerró el incidente con la visita, primero, del director general de la policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez y posteriormente, con el viaje del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien además de entrevistarse con su homólogo marroquí, también lo hizo con el rey de Marruecos, Mohamed VI.
