BARCELONA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia de Barcelona ha condenado a 17 años y medio al joven que mató a navajazos a un joven a la salida de una discoteca del barrio de Sants de la capital catalana, después de que un tribunal popular le declarara culpable de asesinato con alevosía. También deberá indemnizar con 420.000 euros a los padres y a los tres hermanos del fallecido.
El crimen ocurrió sobre las cinco de la madrugada del 24 de diciembre de 2005, cuando la víctima, Ismael R.L., de 30 años, discutió con Carlos M.M., de 26, cuando estaban a punto de irse del local. Ya en la avenida Madrid, Carlos M.M. y otro joven, Ernesto D.M., de 25, volvieron a discutir con Ismael R.L. y su hermano José.
De repente, Carlos M.M. propinó un puñetazo a Ismael R.L. y ambos se enzarzaron en una pelea, en la que José R.L. intentó ayudar a su hermano. No obstante, Ernesto D.M. se lo impidió y empezaron a pegarse. Durante la reyerta, Carlos M.M. sacó una navaja y apuñaló varias veces a Ismael R.L., quien falleció instantes después desangrado.
Desde el día del crimen y pese a que eran amigos desde la infancia, Ernesto D.M. no volvió a ver a Carlos M.M. hasta que fue detenido el 8 de febrero de 2007, dos días después de que el otro acusado fuera detenido en Alicante, en el marco de una operación contra el narcotráfico, y cuando los Mossos d'Esquadra ya habían archivado el caso porque el autor del crimen se encontraba en paradero desconocido.
Ninguno de los miembros del tribunal consideró que Carlos M.M., con múltiples antecedentes, actuara en defensa propia ante el supuesto ataque de la víctima, de 1,92 metros de altura y unos 120 kilos de peso, como alegó durante el juicio, y le declararon culpable.
En cambio, el magistrado-presidente absolvió 'in voce' a Ernesto D.M. porque sólo dos jurados entendieron que ayudó en el crimen, al impedir que José R.L. auxiliara a su hermano.
