Mediavilla aboga por el consenso en torno el candidato cántabro al Constitucional, que debe tener "gran talla jurídica"

Actualizado: sábado, 24 noviembre 2007 18:11


SANTANDER, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Presidencia y Justicia, Vicente Mediavilla, apostó hoy por buscar el consenso entre los grupos representados en el Parlamento regional y el Ejecutivo autonómico a la hora de proponer candidatos para la renovación de magistrados en el Tribunal Constitucional (TC) y subrayó que el candidato debe ser un jurista de "gran talla jurídica, de reconocido prestigio a nivel nacional y sin ningún tipo de adscripción política partidista".

Según recordó el consejero, en declaraciones a Europa Press, con la reforma del Reglamento del Senado las comunidades autónomas pueden proponer candidatos para que la Cámara Alta seleccione entre ellos los cuatro magistrados del Constitucional que designa el Senado.

El Tribunal Constitucional está formado por una docena de magistrados que se renuevan por tercios cada nueve años. El 16 de diciembre expira el mandato de los cuatro magistrados designados por el Senado y la Cámara Alta debe elegir sus sucesores. Con el nuevo Reglamento del Senado, las comunidades autónomas tendrán voz en este proceso y podrán proponer cada una un máximo de dos candidatos y, una vez recibidas todas las propuestas, se seleccionará entre todas ellas los cuatro magistrados para el nuevo mandato.

Para Mediavilla, esta posibilidad que se ofrece a las comunidades autónomas es "sustancial y fundamental" y resulta "altamente positiva", por cuanto supone "ir consolidando paulatinamente el Estado autonómico" ante el órgano que es "el máximo intérprete de la Constitución Española y de los estatutos de autonomía".

Lo que le gustaría al consejero es que la propuesta cántabra, bien incluya uno o dos candidatos, sea "consensuada por los tres grupos parlamentarios". "Sería muy deseable que los grupos y el Gobierno alcanzáramos un acuerdo y todos apoyásemos el hecho de poder contar con un magistrado en el Tribunal Constitucional", señaló.

A su juicio, "antes de poner nombres encima de la mesa" se debería definir el perfil del candidato que, para el consejero, debe ser un jurista "de reconocido prestigio, independiente desde el punto de vista político, de acreditada competencia y de muy alta cualificación, tanto moral como intelectual y de su formación".

"Hay que buscar un perfil profesional e intelectual" y un candidato que, si finalmente es elegido como magistrado del Alto Tribunal, "defienda los principios constitucionales bajo el prisma de la legalidad y del derecho constitucional y administrativo", agregó.

En opinión de Mediavilla, cuanto más acertada sea la candidatura y más se ajuste a esos requisitos, más posibilidades habrá de que la propuesta cántabra sea una de las elegidas. Para ello, apostó por "huir" de propuestas "exclusivamente partidistas" y buscar una propuesta consensuada que responda al perfil definido por todas las partes. El consejero reconoció que es difícil encontrar juristas que alcancen las exigencias que requeriría un cargo como éste, porque "son muy poquitos", pero aun con todo dijo tener alguno "en mente".

"CONVULSIÓN" EN EL CONSTITUCIONAL

Finalmente, Mediavilla lamentó que el Tribunal Constitucional está viviendo una "convulsión" con las recusaciones de magistrados, tanto por parte del PP, como del Gobierno español, "ambas no muy procedentes" desde el punto de vista del consejero cántabro. Según dijo, el Constitucional "tiene que ser un órgano ajeno a la "disputa política" y "absolutamente independiente".

Además, rechazó que se encasille a los magistrados como conservadores o progresistas porque, a su juicio, "todos ellos están por encima de eso". Agregó que el Constitucional debe tener garantizada su "imparcialidad e independencia", principios que, en su opinión, "cumplen a rajatabla" los magistrados.