Montaño pedirá a Cultura que incremente su aportación al ICAS y da por superadas las diferencias con la Junta

Actualizado: domingo, 13 enero 2008 13:35

SEVILLA, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -

La delegada de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Maribel Montaño, da por superados los "problemas" que su antecesor, Juan Carlos Marset, tuvo con la Consejería de Cultura, cuando criticó que ésta no pagaba los dos millones de euros comprometidos para el ICAS, y anunció además que pedirá al departamento de Rosa Torres que en 2008 se incremente esta cantidad "de forma razonable".

Montaño se mostró, en declaraciones a Europa Press, "satisfecha con la relación que mantiene con la Junta", aunque avanzó que el Consistorio quiere "aumentar esta colaboración, logrando que crezca la aportación que Cultura hace a las actividades de Sevilla, una ciudad que es la capital de Andalucía, como reconoce el Estatuto, y que quiere unos recursos a la altura de su importancia".

Concretamente, detalló que ese refuerzo de la ayuda autonómica se centraría en incrementar los fondos de la Bienal de Flamenco, la programación del Teatro Lope de Vega y una "ayuda suplementaria" para la creación del Museo Thyssen.

Además, la responsable municipal aseguró que la Consejería ya ha abonado los dos millones de euros correspondientes al convenio de colaboración de 2007 y suscrito entre el ICAS y la Consejería, cuya firma, prevista para enero del citado año, se retrasó hasta julio, lo que originó la protesta del Ayuntamiento municipal.

Preguntada sobre si en estos momentos en el cargo se ha encontrado con algún problema con la Consejería, Montaño recordó que cuando el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, la nombró delegada, entre otras cosas, le pidió "establecer la mejor relación posible con la Junta". En su opinión, "sería una barbaridad" no entenderse con el equipo de la Consejería, ya que conoce personalmente al delegado provincial, Bernardo Bueno, a la consejera y a varias directoras generales de su etapa en la Consejería.

Con respecto a las polémicas anteriores entre ambas administraciones --desmentidos de la Junta al Ayuntamiento sobre la sede de la Casa de los Poetas o las críticas municipales al impago de la Junta al ICAS--, la delegada valoró que "a veces son inevitables los roces, que pueden venir originados por los propios caracteres de las personas". No obstante, añadió que "es una suerte para Sevilla que las personas que ahora están al frente de la gestión cultural se conozcan y entiendan".

El ex delegado de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla Juan Carlos Marset manifestó en mayo públicamente su "preocupación" por el retraso en al renovación del acuerdo financiero por el que la Junta aportaba dos millones de euros al ICAS, algo que, según dijo, estaba generando en este organismo municipal "problemas de liquidez", lo que hacía "peligrar" algunas de sus actividades. El delegado provincial de la Consejería, Bernardo Bueno, le pidió que se "tranquilizase", porque la Junta cumpliría el compromiso de los dos millones de euros para el Instituto.

Cuando se creó el ICAS a final de 2005, Cultura duplicó para todo 2006 la inversión que dedica a la colaboración con el Ayuntamiento de Sevilla para actividades culturales, llegando a los dos millones de euros. Esta participación económica de la Junta en el ente municipal se enmarca en el protocolo de intenciones que firmaron ambas administraciones en 2005, a fin de potenciar la coordinación y la colaboración mutua en actividades culturales.