BARCELONA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat, José Montilla, consideró que el líder de CiU, Artur Mas, "va con el reloj cambiado" y se le ha quedado "unos cuantos meses atrás" porque concentra su discurso de campaña en el tripartito catalán. "O quizás es que quiere un nuevo tripartito, formado por CDC, UDC y PP", apuntó irónicamente.
Ante las críticas de Mas, que acusó al PSC de haber "humillado" a ERC durante los dos años de tripartito, Montilla admitió haber tenido "desencuentros" con los republicanos en la etapa de socios de gobierno, pero quiso reconocer también "la valentía de los dirigentes de ERC al hacer una apuesta por el cambio en Cataluña después de 23 años de gobierno nacionalista".
"Es sobradamente conocido que hemos tenido también desencuentros" con ERC "pero Mas seguro que también ha tenido los suyos y si repasamos las hemerotecas, encontraríamos muchas cosas que Mas ha dicho de ERC y que seguramente hoy querría olvidar", apuntó.
Montilla respondió también a las críticas del secretario general del PP, Ángel Acebes, y aseguró que para él son "motivo de satisfacción" mientras que "si Acebes hablara bien de mí estaría estaría muy preocupado". El dirigente popular dijo de Montilla que era "pura continuidad de la política nacionalista y caótica de Pasqual Maragall".
El candidato socialista hizo estas declaraciones desde la Abadía de Montserrat, donde acudió a entrevistarse con el padre abad, Josep Maria Soler, en su primer acto después de abandonar oficialmente el cargo al frente del Ministerio de Industria, lo que le permite a partir de hoy una dedicación exclusiva a la precampaña para las elecciones autonómicas.
Tras su encuentro con el abad, Montilla aseguró que si llega a ser presidente "tendrá muy en cuenta" que la religión "representa valores esenciales para nuestra sociedad, como la justicia social y la solidaridad".
"Nosotros defendemos la separación de la Iglesia y el Estado, la aconfesionalidad de las instituciones y la laicidad, pero eso no quiere decir indiferencia hacia el hecho religioso", dado que "la religión es un factor de integración social", señaló el candidato socialista.
