El obispo de Astorga afirma que el Gobierno "se ha enfrentado a todos los temas que podían molestar a la Iglesia"

Actualizado: domingo, 2 julio 2006 16:42

VALLADOLID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Astorga, Camilo Lorenzo, asegura que el Gobierno "se ha enfrentado a todos los temas que podían molestar a la Iglesia" al tiempo que asegura que "se está dinamitando una base de la sociedad que luego se paga".

Lorenzo, en una entrevista al diario ABC recogida por Europa Press, reconoce los "desencuentros" entre la Iglesia y el Gobierno ya que, según explica, "se han tocado los temas morales que afectan directamente" como la enseñanza religiosa o la familia.

Por ello, reconoce que esta situación "preocupa" no sólo desde el punto de vista religioso "sino también desde lo que significa para las sociedad. Se favorece el divorcio y si hay una familia dinamitada se está dinamitando una base de la sociedad que luego se paga". "Cuando nos encontramos con personas con problemas de drogas, alcohol o situaciones de desequilibrio, siempre nos remontamos a sus condiciones familiares", añade.

Por otro lado, defendió la presencia de la religión en las aulas para "dar una formación integral" a los alumnos ya que, en su opinión, "es un aspecto fundamental de la persona".

Lorenzo afirma que la religión "debe estar en la escuela. No es catequesis no examen de fe, sino que es examen de conocimiento de la religión católica".

Al respecto, el prelado de Astorga indicó que asevera que la persona "debe crecer en todas las dimensiones. Creemos que no es adecuado que los alumnos que no son católicos no tengan un conocimiento de lo que es la cultura cristiana".

Por otro lado, se refirió a los matrimonios gays y afirmó que la Iglesia "nunca" ha condenado a los homosexuales, al tiempo que precisó que "tal vez la Iglesia es la que más les ha respetado frente a la sociedad, a nivel popular, que les ha despreciado".

En este sentido, Camilo Lorenzo precisa que la Iglesia "lo que no quería es igualar cosas que no se podían igualar" y lamenta la situación creada sobre este debate, al tiempo que afirma que por una parte la natalidad es baja "y por otro lado favorecemos el aborto, los métodos anticonceptivos. Uno no sabe ya muy bien lo que se quiere".