BILBAO, 6 Abr. (OTR/PRESS) -
Al presidente del PNV vizcaíno, Andoni Ortuzar, no le hizo nada de gracia que el secretario general del PSE-EE, Patxi López, asegurara ayer que el tripartito vasco "ya no sirve" porque está "apagado y fuera de cobertura", y reclamó a los socialistas vascos que dejen "esta escalada de insultar al PNV y al lehendakari", ya que mientras sigan los improperios será "muy difícil creer en la voluntad de diálogo" del presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero.
Con estas advertencias respondía Ortuzar a las declaraciones realizadas ayer por el propio López en las que proponía que el actual Gobierno Vasco había quedado obsoleto después del descenso sufrido por los partidos que lo forman en las elecciones generales del 9 de marzo. Así, el líder del PNV de Vizcaya exigía en una rueda de prensa celebrada hoy en la Sabin Etxea (sede del PNV) de Bilbao "respeto" a los socialistas y que cesen de insultarles, como "retrotrayéndose a la época negra de Nicolás Redondo".
En su opinión, es "una gran contradicción pedir unidad a los partidos políticos, sólo en aquello que les interesa, y, a renglón seguido, insultar y faltar a la verdad". En concreto, consideró un "contrasentido" que Zapatero y el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, "digan que quieren una relación preferente con el PNV y lugo aquí, sus subalternos se dediquen a manchar" su "buen nombre".
Por ello, y tras advertir de que "ambas cosas son incompatibles, Ortuzar aseguró que mientras los dirigentes del PSE sigan con "ese estilo faltón y barriobajero hacia el PNV, va a ser muy difícil creer en la voluntad de diálogo de Zapatero".
Sobre la polémica creada en torno al ayuntamiento de Mondragón (Guipúzcoa) Ortuzar recordó a López que ya conoce que "el compromiso del PNV y del lehendakari contra el terrorismo es firme, claro y limpio", y que el suyo es "el único partido político con responsabilidades municipales que no tiene ningún acuerdo con ANV, cosa que no pueden decir, por ejemplo, los socialistas, que tienen un acuerdo de tapadillo en Urretxu".
LA "BORRACHERA ELECTORAL" DEL PSE
Al respecto, y después de que el presidente peneuvista, Iñigo Urkullu, pidiera la dimisión de los cargos institucionales de ANV por no condenar las amenazas de ETA, el portavoz y secretario de Organización del PSE, Rodolfo Ares, se alegró de la decisión aunque esperó que salga adelante la moción de censura en Mondragón con el apoyo del PNV "por una cuestión de dignidad democrática".
Por otro lado, negó que el PSE esté sufriendo los efectos de "una borrachera electoral" tras los resultados de las generales, tal y como indicó el propio Ortuzar, porque a su juicio los socialistas vascos "nunca hemos estado tan serenos y tan conscientes de la responsabilidad que la ciudadanía vasca nos ha dado".
