BILBAO, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del Partido Popular del País Vasco, Carmelo Barrio, criticó hoy que el partido de fútbol que enfrentará a las selecciones vasca y catalana el próximo día 29 se ha convertido en "un akelarre nacionalista". Asimismo, reprochó al Gobierno vasco que "financie y apoye al colectivo Esait, significado por la radicalidad de su planteamiento".
En un comunicado, Barrio censuró que el evento, que "debería ser exclusivamente deportivo y lúdico", ha adquirido un "carácter político nacionalista", con lo que ha quedado "completamente desvirtuado y devaluado en lo deportivo y se ha convertido en un akelarre nacionalista, en una algarada política que excluye a la mitad de los vascos por su cariz nacionalista y por su componente de reivindicación independentista".
El representante del Partido Popular lamentó, en este sentido, que "el PNV y el conjunto del nacionalismo traten de apoderarse de todo en el País Vasco -deporte, cultura, finanzas, medios de comunicación-, los tentáculos del nacionalismo tratan de asfixiarlo todo en nuestra comunidad y esto es intolerable".
"Los nacionalistas no respetan ni lo más sagrado que nos debería unir a todos como son nuestros dos idiomas, euskera y castellano, el deporte o los medios de comunicación públicos, y tratan de politizar e imponerse en todos los ámbitos de una forma vergonzosa", insistió Barrio.
En este sentido, recordó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, y a su partido "la frase del insigne de que 'fútbol es fútbol'" ya que "efectivamente, fútbol es fútbol y deporte es deporte, y es intolerable que se mezcle con política".
Barrio denunció que "el partido del sábado 29 se presume como una orgía de radicalidad" e indicó, en este sentido, que se ha producido una "concesión a los batasunos" aceptando "el cambio de nombre de Euskadi para llamar a la selección Euskal Herria".
"RADICALIDAD" DE ESAIT
De este modo, el Partido Popular criticó al Gobierno vasco por "financiar y apoyar a un colectivo caracterizado por su radicalidad como Esait". Asimismo, pidió al delegado de Gobierno, Paulino Luesma, que "no mire para otro lado" ante este "desafío" y "la política de "hechos consumados".
El dirigente del PP lamentó que, "también en el deporte", el nacionalismo "apuesta por la división, la exclusión y la politización". A su entender, "sobra radicalidad y falta espíritu deportivo también en este asunto".
"Así es imposible la identificación del conjunto de los vascos con la selección autonómica de fútbol y es imposible dotar de naturalidad y de espíritu festivo a un evento completamente desvirtuado por la obsesión nacionalista", concluyó Barrio.
