MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, y la dirección del Grupo Parlamentario Socialista iniciarán hoy miércoles una ronda de contactos con los partidos políticos que han obtenido representación parlamentaria de cara a la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno.
La ronda de reuniones comenzará a las 10.00 horas con Uxue Barkos, diputada de de Nafarroa Bai, para continuar con Francisco Jorquera, del BNG, a las 11.00 horas, y Ana María Oramas, de Coalición Canaria, a las doce del mediodía. Ya por la tarde, los socialistas mantendrán encuentros con Gaspar Llamazares y Joan Herrera, de IU-ICV, y con Rosa Díez, de UPyD.
ALONSO, A LA OTAN CON ZAPATERO.
Fuentes socialistas explicaron que está previsto que a estas primeras reuniones asista, junto a Blanco, el secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Ramón Jáuregui pero no el portavoz, José Antonio Alonso ya que, en su condición de ministro de Defensa en funciones, viajará hoy a Bucarest para participar en una Cumbre de la OTAN junto a Zapatero y el titular de Exteriores, Miguel Angel Moratinos. Alonso regresará a Madrid con Zapatero mañana por la tarde, de modo que podría sumarse a las reuniones que tengan lugar el viernes.
Según el calendario que maneja el PSOE, mañana continuarán las entrevistas con ERC y, posiblemente, también con el PNV, y el viernes se celebraría la cita con CiU, ya con la presencia de Alonso. También se trata de buscar una fecha esta semana con el PP, pero aún no se conocen más detalles.
El PSOE afronta esta ronda de contactos con la intención de recabar el máximo apoyo para la investidura de Zapatero y, aunque escuchará las peticiones de todos los portavoces parlamentarios, ya ha dejado claro que no llegará a ningún acuerdo que no esté en total sintonía con su programa electoral.
Desde que ganó las elecciones del pasado 9 de marzo, los socialistas advierten de que tienen más diputados que en la anterior legislatura y, por lo tanto, piensan gobernar con más autonomía. En Ferraz aseguran que no les preocuparía en absoluto que Zapatero fuera investido presidente en una segunda votación por mayoría simple si no consiguen los siete votos necesarios para alcanzar la mayoría absoluta en la primera votación (176, frente a los 169 escaños socialistas).
Además, el PSOE insiste en que al margen de los apoyos que se consigan para la investidura, mantendrán su disposición al acuerdo y a los entendimientos puntuales a lo largo de toda la legislatura.
DEL PNV DEPENDE SALVAR LA PRIMERA VOTACIÓN.
A priori, los socialistas no tienen garantizados el apoyo de ningún grupo. Los más proclives a apoyar la investidura del presidente serían el BNG, con quien comparten gobierno en Galicia y que condicionan su voto a la división del Grupo Mixto, y Coalición Canaria, que ayer apoyó la elección de José Bono como presidente del Congreso y que haría lo propio con Zapatero si hay un cierto grado de compromiso con Canarias en la nueva etapa.
No obstante, la clave para superar la votación al primer intento sigue siendo el PNV, como ocurrió ayer con la elección del presidente del Congreso. Sin sus votos, el PSOE no llegaría a la mayoría absoluta, máxime cuando CiU ya ha adelantado que de momento prefiere la abstención.
Esquerra Republicana, Izquierda Unida e Iniciativa per Catalunya ponen condiciones al Gobierno que el PSOE no puede garantizar con inmediatez. Así, los independentistas exigen la publicación de las balanzas fiscales antes de profundizar en cualquier tema e IU hace de la reforma de la Ley Electoral condición inexcusable para decantarse en un sentido o en otro.
