Pizarro emplaza a Arenas a "enfrentarse" a Rajoy en lugar de "aferrarse de forma absurda" al rechazo a la 'realidad nacional'
SEVILLA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
La dirección del PSOE andaluz emplazó hoy al PP a proponer fecha para la celebración de la reunión entre el secretario general del PSOE-A y presidente de la Junta, Manuel Chaves, y el presidente regional del PP, Javier Arenas, para acercar posiciones en torno a la reforma del Estatuto de Autonomía en vez de anunciar el envío de un nuevo documento en respuesta al remitido el pasado sábado por Chaves en contestación al decálogo del líder popular.
El secretario de Organización del PSOE-A, Luis Pizarro, lamentó la reacción "a la defensiva, inmovilista e intransigente" de los populares a la última propuesta de Chaves, en la que abría la puerta a incluir una referencia expresa a la unidad de la nación española en el futuro Estatuto, y censuró que el PP siga "aferrándose de forma absurda" a su rechazo a reconocer la "realidad nacional" de Andalucía en el preámbulo como "excusa" para "ocultar su falta de compromiso con la reforma del Estatuto y con el pueblo andaluz".
En rueda de prensa posterior a la reunión del Pleno de la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE-A, Pizarro destacó que la respuesta de Chaves al decálogo de Arenas ha sido "seria y rigurosa" y establece un marco para abrir las negociaciones entre ambos partidos, por lo que señaló que sería "grave y muy poco serio" que el PP respondiese con un nuevo documento en lugar de "ponerse en contacto con nosotros para fijar fecha cuanto antes" para mantener esas conversaciones al máximo nivel.
QUE ARENAS SE ENFRENTE A 'GÉNOVA'
Tras subrayar que la respuesta "claramente a la defensiva" a la última propuesta de Chaves evidencia que el PP "no tiene voluntad de acuerdo" antes del Pleno del 2 de mayo, el dirigente socialista advirtió a Arenas de que "le queda poco tiempo para rectificar, ponerse al lado de los andaluces y rechazar a quienes quieren imponerle una posición en contra del Estatuto andaluz, como ya le ocurrió en 1980".
En este sentido, Pizarro expresó su confianza en que el líder del PP-A "reflexione, rectifique su estrategia y se enfrente" a la dirección nacional de su partido, contraria a cualquier reforma estatutaria "homologable" a la aprobada para Cataluña, para "situarse al lado de Andalucía", ya que se mostró convencido de que, en caso contrario, "los andaluces tomarán buena nota y el PP lo pagará este segundo error histórico en términos políticos y electorales".
Pese a todo, el número dos del PSOE-A garantizó que su partido seguirá "trabajando de aquí al día 2" para intentar que el PP "deje al margen estrategias partidarias" y vote 'sí' a la reforma del Estatuto en el Pleno del Parlamento andaluz, lugar donde, en su opinión, "debe producirse la rectificación", al margen de las "coyunturas legítimas" que puedan plantearse una vez que el texto inicie su tramitación en las Cortes Generales, cuando ya se habrá aprobado definitivamente el Estatut catalán.
EL PP-A, MÁS PREOCUPADO POR EL ESTATUT CATALÁN
"No sé si el PP contempla ese escenario, pero con ello sólo demostraría que está más preocupado por el Estatuto de Cataluña que por el de Andalucía, al que ya ha votado que no en todos los artículos", añadió Pizarro, que se mostró convencido de que "ya muy pocos dudan de que la responsabilidad para llegar a un acuerdo está en la mesa del PP, porque no hay una sola razón objetiva o de peso para votar en contra de la reforma".
En su opinión, la actitud de "inmovilismo e intransigencia" del PP en el debate sobre la reforma del Estatuto y su insistencia en "no situarse al lado de los intereses de los andaluces" no dejará de tener incidencia a nivel interno en el seno del propio PP, ya que auguró que tanto los alcaldes como los dirigentes provinciales del partido "terminarán por pedir responsabilidades a Javier Arenas, que con su estrategia los va a llevar a la ruina electoral".
Por último, Pizarro se refirió a la actitud del PA para dejar clara la disposición del PSOE a acercar posiciones también con este partido, aunque lamentó que la "gran bisoñez e infantilismo político" de su máximo responsable, Julián Alvarez, hace "muy difícil" poder mantener encuentros bilaterales.
