Unos 16.000 soldados y 100 marineros se verán afectados por los cambios en los próximos meses
MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
La aplicación del Real Decreto de Organización de la Fuerza de los Ejércitos y la Armada --aprobado el pasado mes de abril en Consejo de Ministros-- supondrá la supresión de 24 unidades tipo batallón del Ejército de Tierra y cuatro comandancias navales de la Armadas y afectará a unos 16.000 efectivos del Ejército y 100 de la Armada, según explicaron hoy en el Congreso el jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Sebastián Zaragoza Soto, y el jefe de Estado Mayor del Ejército (JEME), general de Ejército Carlos Villar Turrau.
En su comparecencia ante la Comisión de Defensa de la Cámara Baja para explicar la partida presupuestaria asignada a su Ejército en 2007, el JEME señaló que la puesta en marcha del decreto de reestructuración afectará a 60 unidades de la fuerza y a 16.000 militares en total. Concretamente, 23 unidades serán trasladadas y otras 33 serán disueltas, 24 de ellas tipo batallón.
El general Villar Turrau afirmó que el decreto de reorganización también marca un nuevo límite para la escala de Tropa profesional, que pasa de los 86.000 a los 60.000 efectivos como máximo. En la actualidad, la plantilla de soldados profesionales cuenta con 54.404 soldados, lo que supone un incremento de 5.000 hombres y mujeres con respecto al pasado año.
Aseguró, en este sentido, que la nueva estructura del Ejército implica "una transformación realista" y resaltó que el objetivo es dotar a Tierra de una composición basada en unidades permanentemente disponibles e interoperables con las de países aliados.
Con respecto a la partida asignada al Ejército de Tierra por el Ministerio de Defensa para el año 2007, el general Villar Turrau, que comparecía por primera vez en sede parlamentaria, aseguró que la dotación asignada consolida la tendencia al alza, con un incremento en los últimos tres años de más del 20 por ciento, "una tendencia esperanzadora".
También se refirió a programas tecnológicos de última generación como el proyecto del 'Combatiente futuro' o el demostrador no tripulado desarrollado por el INTA en colaboración con el Ejército. Villar Turrau incidió en que el desarrollo del 'Combatiente futuro' tendrá consecuencias positivas para todas las fuerzas terrestres, incluida la Infantería de Marina, y explicó que el objetivo de su Ejército es definir en los próximos dos años dos o tres modelos de vehículos no tripulados para incorporarlos a su arsenal.
Por su parte, el jefe del Estado Mayor de la Armada, almirante general Sebastián Zaragoza Soto, también valoró positivamente la dotación económica que el Ministerio de Defensa ha proyectado para la Marina para el próximo año.
Tras asegurar que la partida de la Armada consolida la tendencia al alza de los últimos tres años, el AJEMA también desgranó las implicaciones del Decreto de Reorganización de la Fuerza de los Ejércitos y la Armada y explicó que dicha medida conllevará la supresión de cuatro comandancias navales y únicamente afectará a 100 efectivos.
