MADRID, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Rey apostó hoy por que la UE responda de forma coordinada ante la actual crisis financiera mundial y consideró que el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, está hoy donde tiene que estar, en alusión a su ausencia en la recepción que la Familia Real ofrece cada año con motivo de la Fiesta Nacional.
Nada más terminar el desfile de las Fuerzas Armadas con motivo de la Fiesta Nacional, Zapatero se desplazó a Moncloa para preparar la reunión que esta tarde celebrarán en París los jefes de Estado y de Gobierno que componen el Eurogrupo, formado por los países que han adoptado el euro.
Don Juan Carlos se pronunció en este sentido ante un grupo de invitados a la recepción en el Palacio Real, ante los que también subrayó que, ante la actual situación económica, hay que aguantar el tirón.
El Príncipe también charló con algunos invitados sobre la crisis financiera y esperó que la reunión de hoy en París salga mejor que la que el fin de semana pasado celebraron los líderes de los países europeos del G-8, esto es, Francia, Reino Unido, Alemania e Italia, tras la cual cada uno de ellos actuó de forma diferente.
Tanto el Rey como Don Felipe se mostraron satisfechos de cómo había discurrido el desfile, a pesar de que el mal tiempo ha impedido volar a los helicópteros de las Fuerzas Armadas y a los aviones de transporte de la Fuerza Aérea.
A la recepción en el Palacio Real ha acudido la plana mayor del Gobierno. Allí se ha podido ver a la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega y a los ministros del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos; Justicia, Mariano Fernández Bermejo; Defensa, Carme Chacón; Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho; Educación, Mercedes Cabrera; Sanidad, Bernat Soria; Administraciones Públicas, Elena Salgado; Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia; Igualdad, Bibiana Aído; Vivienda, Beatriz Corredor y Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Elena Espinosa.
También han acudido otros altos representantes de las instituciones del Estado, como la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas; el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, y los presidentes del Congreso y el Senado, José Bono y Javier Rojo, entre otros.
La cúpula militar acudió encabezada por el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general José Julio Rodríguez Fernández y el cuerpo diplomático por el nuncio del Vaticano en España, Manuel Monteiro de Castro. En cuanto a presidentes autonómicos, acudieron los de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; Cantabria, Miguel Ángel Revilla; Ceuta, Juan Jesús Vivas y Melilla, Juan José Imbroda.
Durante la línea de saludos de los invitados a la Familia Real, éstos mostraron especiales muestras de afecto al ex ministro de UCD Álvaro Rengifo, hoy en silla de ruedas. El senador y presidente fundador del PP, Manuel Fraga, fue de los que más se detuvo en hablar con los Reyes y los Príncipes durante el besamanos.
También acudieron a la recepción el líder del PP, Mariano Rajoy, la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal y el líder de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares.
En total, la Casa Real ha cursado este año para la recepción en el Palacio Real alrededor de un millar de invitaciones dirigidas tanto a los representantes de las instituciones del Estado como a los distintos sectores de la sociedad. De esas invitaciones, casi 200 fueron para representantes de los medios de comunicación.
En años anteriores, además de los periodistas invitados por Casa Real, la prensa podía solicitar una acreditación previa para cubrir el acto, pero en esta ocasión la Casa del Rey ha optado por ampliar la lista de periodistas invitados y limitar las acreditaciones con el objeto de impedir que se formaran improvisadas ruedas de prensa con el presidente del Gobierno y el líder de la oposición como venía ocurriendo de cinco años a esta parte.
