Sebastián: "Ya sólo quedan 13 días de Bush, y pasan rápido"

Actualizado: viernes, 24 octubre 2008 1:36


TIANJIN (CHINA), 23 Oct. (EUROPA PRESS/Débora Altit) -

El ministro español de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, relacionó hoy directamente la crisis financiera internacional actual con el Ejecutivo de George W. Bush, afirmando que una vez se produzca el cambio de gobierno en Estados Unidos, la situación económica mejorará de forma automática.

"Es evidente que la crisis se originó en Estados Unidos, estamos en un mundo global, en un sistema financiero integrado y no nos podemos aislar de las turbulencias financieras de Estados Unidos. Ya sólo quedan trece días de Bush y trece días pasan rápido", afirmó Sebastián en unas declaraciones que se desmarcan de la línea de cautela y de respeto a la contienda estadounidense que está caracterizando las declaraciones de otros países.

Sebastián defendió la actuación de Europa ante la crisis, que calificó de "buena", y afirmó que lo que ahora hace falta es tiempo. "Necesitamos tiempo para que la respuesta se materialice en una bajada de los tipos de interés y en una mejora de las capacidades crediticias de las familias y empresas europeas", manifestó.

El ministro, presente en Tianjin, el principal puerto del norte de China, para asistir a la inauguración del Foro de Inversión y Cooperación hispano-chino, al que asistieron alrededor de 360 empresas chinas y españolas, defendió también la función del país asiático en su papel estabilizador de la actual situación financiera mundial.

Sebastián adelantó incluso que China podría ser uno de los principales compradores de la deuda española. "China se va a convertir en uno de los principales inversores, han demostrado que están muy interesados en participar en la emisión de deuda", indicó.

El responsable español de Comercio, que aseguró que este interés de China por invertir en el exterior o el debilitamiento del euro frente al yuan ayudarán a que España reduzca el déficit comercial que tiene respecto a China, fue también el encargado de renovar el acuerdo de ayudas económicas de España a China, un fondo total de 380 millones que a partir de ahora se orientará principalmente a proyectos tecnológico-industriales.