España insistirá en que en la conferencia internacional que prevé organizar la UE estén presentes "todos" los países miembros
MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, viaja hoy a Bruselas para asistir a un Consejo Europeo que estará marcado por la crisis financiera mundial y cuyo principal objetivo, más allá del acuerdo de nuevas medidas, será extender a los países que no forman parte del Eurogrupo las alcanzadas el pasado domingo en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los países del euro en París.
Según reconoció el secretario de Estado de Comercio, David Vegara, "lo que hemos vivido en las últimas 48 horas no tiene precedentes en cuanto a la respuesta coordinada y la movilización de recursos públicos" por parte de los países europeos. En este sentido, subrayó que lo acordado en París es "una estrategia coordinada y consistente que aborda los principales problemas" a los que se enfrentan los países europeos.
Así las cosas, y tras ser preguntado por la posibilidad de nuevos acuerdos o anuncios de medidas por parte de la Unión Europea y en particular de Zapatero, Vegara consideró que "no cabe esperar sorpresas en este ámbito". Simplemente, añadió, "la presidencia deberá tratar de ampliar el conjunto de países que participan" en la iniciativa aprobada por el Eurogrupo.
En este sentido, el secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, dijo que durante el Consejo de Asuntos Generales celebrado ayer en Luxemburgo no hubo "discrepancias" por parte de los países de la UE que no han adoptado el euro respecto a que la declaración de París se incluya en las conclusiones del Consejo Europeo, si bien reconoció que podrían producirse enmiendas o modificaciones.
Por otra parte, Vegara dijo que aunque seguramente uno de los temas a tratar por los jefes de Estado y de Gobierno serán los pagos que reciben los ejecutivos, será "difícil que haya una armonización" respecto a esta cuestión. No obstante, opinó que los líderes europeos darán "un mensaje claro respecto a la necesidad de que haya una consistencia razonable entre la gestión de las compañías y los beneficios que reciben".
Asimismo, dijo, el Consejo insistirá en la necesidad de "seguir reforzando los mecanismos de control y seguridad de las garantías de depósito". Así abordará elementos como "la rapidez de cobro en casos de dificultades o los aspectos legales relacionados con el fondo de garantías de depósito.
CONFERENCIA INTERNACIONAL
Por otra parte, López Garrido explicó que se espera que la UE asuma la "iniciativa" de convocar una "conferencia internacional" junto a sus principales socios comerciales y los países emergentes con el fin de sentar las bases de una nueva regulación del sistema financiero internacional.
"El Gobierno español entiende que como se habla de UE se está hablando de todos los países que la forman", afirmó el secretario de Estado, que reconoció que se trata de "una iniciativa ambiciosa" y que está "muy bien pero tiene que ser con todos" los países miembros.
Otro de los aspectos a abordar en este Consejo Europeo será el Tratado de Lisboa. El primer ministro irlandés, Brian Cowen, expondrá a sus homólogos como ve la situación en su país después del rechazo al Tratado en el referéndum del pasado mes de junio, si bien, admitió López Garrido, "no se espera ninguna propuesta ni hoja de ruta" por su parte.
Según el secretario de Estado, Cowen pedirá más tiempo hasta diciembre y será entonces cuándo se tenga que establecer el "calendario" para la entrada en vigor del Tratado de Lisboa. En este sentido, subrayó que para España es particularmente importante su entrada en vigor antes de las elecciones al Parlamento Europeo de junio de 2009 porque de lo contrario se contará con cuatro eurodiputados menos y porque si no quedará en suspenso el marco institucional en el que España asumirá su presidencia de turno en el primer semestre de 2010.
Por otra parte, hizo especial hincapié en la aprobación por parte de los líderes europeos del Pacto Europeo sobre Inmigración y Asilo (PEMA), en el que "ha tenido mucho que ver España", sobre todo en lo que respecta al apartado de la "cooperación y la colaboración con los países de origen de la inmigración". Asimismo, resaltó el "enfoque positivo" que se hace de la inmigración y que supone la base para la futura política común europea en la materia.
GEORGIA Y RUSIA
El otro gran tema que figura en la agenda del Consejo Europeo es Georgia y las relaciones con Rusia, que abordarán durante la cena los ministros de Exteriores durante la cena de mañana. Respecto a esta cuestión, López Garrido reconoció que no todos los países hacen una misma lectura de la retirada rusa de territorio georgiano, ya que algunos consideran que hay más tropas de las que había antes del 7 de agosto en las dos regiones separatistas.
No obstante, dijo que "existen las condiciones para que haya una cumbre con Rusia el próximo 14 de noviembre en Niza" y que será entonces cuando "se evalúe el inicio de la negociación del acuerdo de asociación" con Moscú que quedó "congelado" a raíz de la respuesta rusa a la operación militar georgiana en Osetia del Sur el pasado agosto.
Por último, según indicó la directora del Departamento de Política Internacional y de Seguridad del gabinete del presidente del Gobierno, Milagros Hernando, está previsto que Zapatero mantenga "contactos" con sus homólogos para conocer de primera mano su postura respecto a la candidatura de Barcelona a albergar la secretaría general de la Unión por el Mediterráneo.
Según Hernando, Portugal, Grecia y Polonia han expresado abiertamente su respaldo a la candidatura de Barcelona pero otros países no han manifestado claramente su posición por distintos motivos, incluida Francia. En este sentido, dijo que finalmente no parece que el Gobierno francés vaya a proponer la candidatura de Marsella, por lo que formalmente y de manera oficial sólo son candidatas Túnez, Malta y Barcelona.
