Zapatero anticipa un partido "difícil" mientras el PP hace consigna de "arrimar el hombro"

Actualizado: lunes, 7 enero 2008 1:00


MADRID/BILBAO, 7 Ene. (OTR/PRESS) -

Con las elecciones generales a dos meses vista, concretamente el 9 de marzo, los partidos, y especialmente los que cuentan con mayores opciones de Gobierno, comienzan a hacer sus cábalas. Así, el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló ayer que "el partido" de los comicios será "difícil", así como el rival al que se enfrentará, Mariano Rajoy, en representación del PP. Para los populares, y tal y como señaló hoy el secretario popular de Política Económica y Empleo, Miguel Arias Cañete, las elecciones serán "muy disputadas", por lo que habrá que "arrimar el hombro" y no dejarse llevar por "preferencias personales".

En una conversación informal al término del acto de la Pascua Militar, en el Palacio Real de Madrid, Zapatero se sirvió de símiles futbolísticos para lanzar su particular quiniela para el próximo 9-M. Al tiempo que abogó por relativizar las encuestas, el presidente señaló que "por interés general" la mejor situación es un partido "empatado". En este sentido, consideró que el encuentro será "difícil" y requerirá "mucho esfuerzo" si se quiere conseguir la victoria. No obstante, el PSOE pondrá su esfuerzo en "ganar bien", sin entrar a valorar la obtención de una pasible mayoría absoluta, pues no va con su estilo "el afán de golear".

Respecto a la posibilidad de lograr consenso en grandes temas de estado, tal y como señaló recientemente el líder del PP, Mariano Rajoy, Zapatero consideró que esto "no forma parte" de la "hoja de servicio" de la oposición, recordando que los populares negaron el acuerdo en asuntos como política antiterrorista o la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Por este motivo, a juicio del presidente del Gobierno, el PP adolece de "un problema serio de credibilidad".

Una novedad que se incluirá en la campaña electoral de las próximas generales será la inclusión de debates entre los líderes. Así, Zapatero calificó estas confrontaciones mediáticas de "muy positivas", confiando en que se conviertan en "una sana costumbre", y sin mostrar preferencias por ninguna cadena en concreta como escenario.

"ARRIMAR EL HOMBRO"

El PP también vaticina unas elecciones generales "muy disputadas". En una época de apuestas acerca de quién irá o no en las listas, "se trata de arrimar el hombro, no de que cada uno ponga encima de la mesa sus preferencias personales", explicó Arias Cañete, quien se mostró a disposición del partido y, por tanto, no sabe si acude como candidato al Congreso o al Senado o por en qué circunscripción se incluirá su nombre. "Todas las provincias merecen defender sus interés", añadió, aunque se sienta especialmente vinculado a Cádiz, lista encabezada para los socialistas por el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Lo cierto es que ante un panorama tan reñido, al menos en previsión, hay quien empieza a hacer sus estimaciones y planear posibles pactos. A este respecto, el portavoz parlamentario del PNV en el Congreso de los Diputados, Josu Erkoreka, declaró hoy que en su partido están dispuestos a dialogar con el que gane las próximas elecciones generales, aunque ve "muy difícil, por no decir casi imposible" apoyar una hipotética investidura del candidato del PP, Mariano Rajoy. "Estamos abiertos a dialogar con quien gane y vaya a gobernar en Madrid. El diálogo no se lo vamos a negar a nadie, pero de ahí a que sea posible un pacto, un respaldo, ya estamos hablando de pasos cualitativos. Veo muy difícil, por no decir imposible, un eventual apoyo a la investidura de un candidato del PP tal como están las cosas y con un PP en la línea de estos cuatro años", argumentó.