Insta al PSOE a no hablar de expectativas electorales, sino de resultados y reclama al partido máxima cercanía con las víctimas
MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recordó hoy al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, en su segunda intervención ante el Comité Federal del PSOE, que quien tiene que garantizar la solidaridad, el sistema general y tiene competencias exclusivas es el propio Estado, según indicaron a Europa Press asistentes a la reunión.
Maragall había puesto de manifiesto en su discurso que Cataluña hacía una aportación "sustancial, muy importante" a la solidaridad interterritorial sólo comparable con Valencia, Madrid y Baleares y sostuvo que ha "llegado la hora de la verdad" en esta materia, ya que, aunque Cataluña seguirá practicando sin regateo la solidaridad, necesita infraestructuras y una capacidad competitiva al nivel exigido por el nuevo escenario para "soldar España con Europa".
El secretario general de los socialistas dijo, de su lado, que Cataluña tiene que ser "solidaria y garantizar la suficiencia" y remarcó que, reconociendo que la Generalitat es Estado, la solidaridad la hace el Estado y no las distintas autonomías,
Zapatero también reclamó a Cataluña que no esté permanentemente enfrascada en el reconocimiento de su identidad y que crezca también hacia fuera. En palabras del secretario de Organización, José Blanco, el líder del PSOE había hecho una reflexión en el sentido de que Cataluña "tenía que crecer hacia afuera, no sólo hacia adentro y no debe aspirar sólo al reconocimiento de la identidad".
HABRÁ 'ESTATUT'.
Según fuentes socialistas, Zapatero se mostró confiado en que el 'Estatut' catalán saldrá adelante. "Confío en que vamos a tener Estatuto, estoy seguro de que va a haber un buen acuerdo plenamente constitucional que respete una financiación autonómica coherente justa y solidaria", dijo el presidente, que se mostró muy "arropado por sus compañeros".
Asimismo, según asistentes a la reunión, Zapatero resaltó que no tenía ningún temor a Cataluña y subrayó que esta comunidad autónoma siempre tuvo especial confianza en la España que representa el PSOE, en referencia a los votos que se obtienen en estas comunidad en las elecciones generales.
En ese punto, Zapatero insistió en no hacer juego a quienes han intentado construir España a base del enfrentamiento. Subrayó, asimismo, que cuanta más exageración pone el PP en el ataque hacia el PSOE, menos "soluciones, ideas y futuro tienen".
VENTAJA EN LAS ELECCIONES.
Zapatero también aprovechó para responder a manifestaciones del sector extremeño referidas a por qué, si la gestión había sido tan buena, no se traducía en mayor ventaja en las encuestas. El presidente, según estas fuentes, subrayó que la ventaja no es la de las encuestas, sino la que el PSOE sacará en las elecciones. Asimismo, vino a decir que si para ellos el problema era el debate del 'Estatut', este debate iba a acabar porque confiaba que habría reforma.
Así, instó al partido a no hablar "de expectativas", sino de "resultados" que son "positivos" y puso como ejemplo los resultados de las pasadas elecciones en Galicia y Euskadi, augurando que serán mejores en las próximas elecciones municipales y autonómicas.
Asimismo, el jefe del Ejecutivo hizo una alabanza al grado de integración cultural que tiene Cataluña. Según las fuentes consultadas, vino a decir que prueba de ello es que extremeños y andaluces viven allí sintiéndose a gusto y que, en ese sentido, Cataluña es un referente para España. Algunos de los asistentes vieron en estas afirmaciones una respuesta a los socialistas extremeños y sus quejas de insolidaridad.
"POLÍTICA PARA LAS VÍCTIMAS".
En cuanto a la situación en el País Vasco, el presidente del Gobierno hizo un llamamiento de todo el partido sobre la atención a las víctimas de terrorismo. "Os pido la máxima cercanía a las víctimas", dijo el líder socialista, avisando de que los miembros de PSOE no serán quienes enfrenten a las personas que han "sufrido y sufren".
"Hay que hacer política para las víctimas y no con las víctimas del terrorismo", advirtió el presidente del Gobierno, que exclamó que "cuánto merece la pena una política para conseguir la paz".
Así, recalcó que tienen una "deuda histórica" con las personas que hicieron la transición que es lograr el fin de la violencia en Euskadi y que por ello hay que intentarlo . Como en su intervención inicial, recalcó que el camino será difícil.
Asimismo, compartió con el secretario general de los socialistas de Alava, Txarli Prieto, la necesidad de que el partido esté presente en el aniversario de la muerte de Fernando Buesa . Por último, y en cuanto al archivo de Salamanca, se mostró agradecido con el PSOE de Castilla y León.
