Zapatero traslada a las víctimas que si hay proceso de paz alcanzará varios Gobiernos

Actualizado: viernes, 17 febrero 2006 22:03


MADRID, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, trasladó hoy a las víctimas del terrorismo que en el caso de que empiece un proceso de paz, algo que todavía no ha sucedido, durará "varios años" y seguramente alcanzará a varios gobiernos. Los organizadores del Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo que se celebró esta semana en Valencia recordaron a Zapatero que en ese proceso tiene que haber necesariamente "vencedores y vencidos", aunque sea "sin humillaciones". Zapatero admite que fue un error no acudir a ese Congreso y pidió disculpas a sus promotores, que las aceptaron.

Al termino de la reunión entre Zapatero y las víctimas, compareció el Alto Comisionado de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces-Barba (en la imagen), quien también estuvo presente en el encuentro. Éste explicó que Zapatero trasladó dos mensajes. El primero, que al Gobierno hay que juzgarle por su política, por los hechos, "no por apreciaciones", como se hizo con anteriores Ejecutivos. El Comisionado aseguró que el Gobierno de Zapatero está recibiendo "un tratamiento injusto sobre elucubraciones que no tienen nada que ver con la realidad de los hechos".

El segundo mensaje es que todavía no se ha iniciado ningún proceso de paz. "Si no hay hechos inequívocos, no habrá empezado nada", dijo Peces-Barba, quien aseguró que en el caso de que ese proceso se inicie "será muy largo, de varios años" y, por consiguiente, afectará a varios gobiernos. "Cada cuatro años, la política será refrendada o no por los ciudadanos", añadió. Hasta ahora Zapatero siempre ha hablado de un proceso largo, pero todavía no se había pronunciado sobre la posibilidad de que se prolongue más allá de la presente legislatura.

Antes de la comparecencia de Peces-Barba, la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mayte Pagazaurtundua, leyó un comunicado, sin admitir después preguntas, con lo que le habían trasladado a Zapatero. Pagazaurtundua aseguró que en este proceso "tiene que haber vencedores y vencidos". "Sin humillaciones, sin crueldad", matizó, pero tiene que haberlos, porque, de lo contrario, "se vulnerarán los principios superiores del ordenamiento jurídico".

Pagazaurtundua dejó varias de las exigencias de las víctimas para que la paz sea posible. "A cualquier precio no es admisible", dijo, ni tampoco basada en la desmemoria, porque "al terrorismo se le derrota". La presidenta de la Fundación advirtió que "los terroristas no son un interlocutor social ni político", sino "criminales organizados para obtener un precio político" mediante el terror.

"Está en juego la paz, no sólo la libertad", añadió, preguntándose "qué vamos a contarle a nuestros hijos si se le da la razón en parte a los terroristas".

"ESA PAZ NO LA ACEPTAREMOS"

Explicó que las víctimas, "su voz, su memoria, su dignidad, su petición de justicia", no puede ser moneda de cambio en un proceso en el que no se puede "primar a los que han transmitido la cultura del odio". "La gran cuestión que hay que decidir es qué paz se va a lograr", dijo Pagazaurtundua, que advirtió que no se puede "primar a los bárbaros y callar a los que denuncian la impunidad". "Esperamos que nada de esto suceda, y nosotros intentaremos alertar para que nada de esto suceda", afirmó, y advirtió: "Esa paz no la aceptará la mayoría de las víctimas en ningún caso".

En el transcurso de la reunión, de algo menos de dos horas, Zapatero admitió que se equivocó al no acudir al Congreso sobre Víctimas que se ha celebrado esta semana y pidió disculpas a sus organizadores. "Nosotros, como personas civilizadas que somos, se las aceptamos", firmó Cayetano González, director del cónclave. "Nos ha dicho que lo lamenta, que reconoce que ha cometido un error, que lo siente, y que acepta las críticas que por esta ausencia se le están haciendo", añadió.

González explicó que su ausencia "destacaba más" con las adhesiones que tuvo el Congreso y con los mensajes y cartas de apoyo que llegaron (entre otros del primer ministro británico, Tony Blair, y de los ex presidente del Gobierno Leopoldo Calvo Sotelo, Felipe González y José María Aznar). Zapatero no les dio más explicaciones para su ausencia que los problemas de agenda, pero González recordó que el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, asistió a la clausura después de estar en el homenaje a Francisco Tomás y Valiente. "Le hemos pedido el esfuerzo, y se ha comprometido a hacerlo, de ser más sensible a estos foros", concluyó.