Bomberos de la ANE se concentran contra los "recortes" en la plantilla

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Foto: EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 13 junio 2014 12:38
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PAMPLONA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

   Bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias (ANE) se han concentrado este viernes en Pamplona para mostrar su rechazo contra "los recortes de plantilla impuestos por el actual Gobierno foral" que, según han asegurado, "repercuten en la calidad el servicio" que prestan.

   Los asistentes a la concentración, convocados por los sindicatos con representación en la comisión de personal de la ANE se han reunido frente al Parlamento de Navarra, en el paseo de Sarasate de Pamplona, tras la pancarta 'Por un servicio público y de calidad. Zerbitzu publiko eta kalitatezko baten alde'.

   En representación de los asistentes, Lander Aurrekoetxea ha leído un comunicado en el que la comisión de personal critica la "dejadez y falta de compromiso que está demostrando a día de hoy este Gobierno respecto al servicio público de bomberos" y el "grave retroceso" que están viviendo "en el ámbito de las emergencias".

   "Nos preocupa, y mucho, hacia dónde están dirigiendo el servicio de bomberos. Un diseño de servicio donde lo único que prevalece es el criterio económico, el ahorro de dinero público, recortando en el principal activo que desde siempre hemos tenido, que es la plantilla", ha afirmado.

   En este sentido, Aurrekoetxea ha destacado que UPN diseñó un servicio de 388 bomberos y en la actualidad la plantilla está compuesta por 347. Por ello, ha censurado que el Gobierno de Navarra "está dirigiendo este servicio a golpe de criterio político, sin importarle lo más mínimo los criterios técnicos que son los que deberían de prevalecer".

   Así, se ha preguntado "cómo entender que en época de bonanza económica se diseñara un tipo de servicio y ahora con la escasez de recursos planteen otro, sabiendo que las urgencias no atienden a un patrón lógico ni estadístico".

   Según Aurrekoetxea, "la radiografía actual del servicio es crítica: un colectivo envejecido que demanda una renovación en su plantilla, una gestión pésima que adolece de líneas estratégicas, un número desproporcionado de mandos que no responden a las necesidades del servicio, y la bajada de efectivos, que deja entrever que el actual número de mínimos marcados en la ley de emergencias pueda ser modificado a la baja".