PAMPLONA, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los grupos parlamentarios de Nafarroa Bai, PSN e IUN sacaron adelante esta tarde en la comisión de Salud una proposición de ley presentada por la coalición nacionalista para modificar la Ley de Sanidad con el objeto de que se reconozca dentro de la sanidad pública navarra la prestación sanitaria de la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) en los términos legalmente previstos.
Esta proposición de ley deberá pasar ahora al pleno del Parlamento de Navarra para su aprobación definitiva. UPN y CDN rechazaron el texto presentado por Nafarroa Bai e indicaron que no aporta novedades respecto al actual margo legislativo.
La proposición de ley faculta a la consejera de Salud del Gobierno foral para que dicte las resoluciones precisas para poner en funcionamiento, con "escrupuloso" respeto a la objeción de conciencia personal de los profesionales, una estructura profesional suficiente que efectúe con dignidad la prestación del servicio sanitario inherente a la IVE en los términos legales previstos dentro de la sanidad pública de Navarra.
La parlamentaria de Nafarroa Bai Asun Fernández de Garaialde defendió que el objetivo de su propuesta es que "la interrupción voluntaria del embarazo dentro de los supuestos legales se haga en Navarra" y afirmó que "este es un reconocimiento del derecho de las mujeres a la IVE".
Fernández de Garaialde criticó que UPN y CDN, que presentaron varias enmiendas a la proposición de ley, "no quieren hacer cumplir" la posibilidad de abortar en Navarra y sostuvo que "parte de la ciudadanía está a disposición de su ideología religiosa o moral".
La portavoz del PSN, María Chivite, consideró que "ya es hora de respetar y garantizar los derechos de las mujeres navarras, amparados por la ley, y todas las iniciativas que vengan en este sentido las apoyaremos".
La parlamentaria de IUN Ana Figueras también apoyó la proposición de ley y manifestó que "es un intento de dar amparo a las mujeres que tienen la necesidad de interrumpir el embarazo y no lo pueden hacer en Navarra".
Ana Figueras consideró que éste es "un avance con respecto a lo que tenemos" y sostuvo que hay que buscar que la interrupción voluntaria del embarazo "sea en el entorno más cercano y siempre rodeado, a poder ser, de las personas más allegadas". "Hay una dejación del Gobierno, que se está quitando de encima un problema", dijo.
En contra de esta proposición de ley se pronunció el portavoz de UPN, Javier Marcotegui, quien indicó que "es evidente" que la intención de los regionalistas en el debate en comisión era "vaciar de contenido" la propuesta de NaBai y argumentó que esta iniciativa "no aporta absolutamente nada".
Marcotegui subrayó que "esto no quiere decir que el departamento de Salud se niegue a prestar la interrupción voluntaria del embarazo en los supuestos establecidos". "El departamento está por la labor de que se preste, y si alguna ciudadana ve que no se cumple, que lo demande inmediatamente al Gobierno por incumplimiento de la ley. Pero se cumple, y por eso no se demanda", dijo.
El portavoz de CDN, José Andrés Burguete, también criticó la posición de NaBai, PSN e IUN y apuntó que sólo el 3 por ciento de las interrupciones voluntarias del embarazo en los supuestos contemplados en la ley tienen lugar en clínicas públicas en España.
En este sentido, citó varias comunidades con gobierno socialista en las que ningún centro público lleva a cabo interrupciones del embarazo y se preguntó si esto será "por ideología religiosa". Burguete resaltó, además, que la normativa estatal impulsada por el Gobierno del PSOE contempla la posibilidad de que, cuando unas prestaciones no se puedan realizar en una determinada comunidad, se pueden remitir a otra región.
Finalmente, manifestó que, a tenor de las intervenciones de los grupos de la oposición, "parece que Navarra es la reserva espiritual de España", y apuntó que "basta ver el dato del 3 por ciento" para desmontar esta teoría.
La portavoz del PSN replicó a Burguete que, salvo las mujeres navarras, "ninguna mujer de ninguna otra comunidad autónoma tiene que peregrinar a otra comunidad para una interrupción voluntaria del embarazo".
