La población activa femenina nativa en Navarra creció un 125 por ciento en los últimos treinta años, según un informe

Actualizado: miércoles, 19 marzo 2008 19:29

Según el Índice Laboral Manpower "Mujeres nativas y actividad laboral femenina1977-2007"

PAMPLONA, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

La población activa femenina nativa en Navarra creció un 125 por ciento en los últimos treinta años. En concreto, de las 47.000 mujeres nativas activas que había en Navarra en 1977, se ha pasado a 106.000 en el año 2007.

Estos datos fueron recogidos en el XXXI Índice Laboral Manpower "Mujeres nativas y actividad laboral femenina 1977-2007: una aproximación por CCAA a la revolución silenciosa del mercado de trabajo español".

El crecimiento acontecido en Navarra tiene dos etapas diferenciadas. La primera tuvo lugar entre los años 1977 y 1995 cuando se incorporaron al trabajo 31.000 trabajadoras (lo que supuso un crecimiento del 66 por ciento). Y la segunda aconteció entre 1995 y 2007 cuando la población activa femenina nativa creció en 28.000 efectivos (+36 por ciento).

Además de destacar el enorme empuje de la oferta de trabajo femenina nativa, la 31ª edición del Índice Laboral Manpower elaborada por el profesor Josep Oliver, catedrático en Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona, advierte de "los problemas de escasez que enfrenta el mercado de trabajo español en los próximos quince años".

POR COMUNIDADES

A nivel nacional, la oferta de trabajo española aumentó en los tres últimos decenios encerca de 5,5 millones, de los cuales el colectivo femenino contribuyó con casi tres cuartaspartes, de forma que unos cuatro millones de mujeres nativas se incorporaron al mercadolaboral.

Por comunidades, las más dinámicas en ocupación han sido las del Mediterráneo yMadrid, que multiplicaron por 2,3 el número de sus mujeres activas nativas, pasando de los1,68 millones de 1977 hasta los 3,86 millones en 2007, mientras que en Andalucía,Castilla-La Mancha y Aragón casi se triplicaron (2,8 veces), pasando de las 660.000 de1977 hasta los 1,81 millones en 2007. En cambio, las CCAA del valle del Ebro y elnoroeste peninsular apenas multiplicaron por 1,6 veces su número de efectivas nativas,pasando los 1,21 millones hasta los 1,97 millones en el mismo período.

AUMENTO TASA DE OCUPACIÓN

El documento recoge el avance de la tasa de actividad femenina nativa, junto con el aumento de la tasa de ocupación y la reducción del paro responden no sólo amodificaciones en la dinámica de la estructura productiva, vía demanda de empleo, sinoque depende naturalmente de los cambios en la población femenina que se encuentra enla edad laboral (16 a 64 años) y de las variaciones en su tasa de actividad en elmercado.

El bajo crecimiento poblacional de las mujeres nativas (0,5 por ciento promedio anual en los últimos 30 años) frente al crecimiento de su población activa, de 2,6 por ciento en el mismo período, da cuenta de una fuerte presión sobre la tasa de actividad. Es decir, mientras que la población femenina nativa potencialmente activa de 16 a 64 años aumentó en1.697.000 (un 15,4 por ciento) entre 1977 y 2006, el número de nativas activas creció en3.946.000 mujeres, un espectacular avance del 111 por ciento.

El fuerte avance de las activas y el débil crecimiento demográfico se ha traducido enimportantes aumentos en las tasas de actividad de las mujeres nativas que, en muchasCCAA, se han situado en valores insólitamente elevados hace ahora pocos años. Así, enlas CCAA del valle del Ebro y el noroeste peninsular es donde se observa un incrementomenor de la tasa de actividad femenina, mientras que las de mayor crecimiento han sidolas CCAA del Mediterráneo, Madrid y Andalucía con un el salto de 16,2 y Castilla-LaMancha y Aragón con 17,2 puntos.

Entre 1995 y 2007, en cambio, la tasa de actividad femenina de España mantuvo el ritmofirme del período anterior, ganando incluso unas décimas más por año. El salto total dela actividad femenina, de 13,9 puntos porcentuales, se distribuyó de forma relativamentepareja por el territorio, colocando en orden descendente a Navarra, Madrid y Aragón porencima de los 17 puntos de incremento, seguidas por La Rioja, Cantabria, las doscastillas, Baleares, Cataluña, el País Vasco y Asturias, con aumentos situados porencima del promedio español (de 13,9 puntos).

Con los incrementos más rezagados, se ubican Andalucía, Galicia y Murcia, aunque, cabe notarlo, el avance de todos modos fue significativo, en torno a los 10 puntos porcentuales. En otras palabras, el incremento de la tasa de actividad femenina fue homogéneamente intenso en este período, incluso, algo más homogéneo que en la etapa anterior, entre 1977 y 1995.

HORIZONTE 2023

El Índice Laboral Manpower pone de relieve que el volumen absoluto de mujeres nativaspotencialmente activas de 16 a 64 años acentuará la pérdida de efectivos, reduciendo deesta manera la base sobre la que se obtiene el volumen efectivo de mujeres en elmercado de trabajo.

Así, mientras que entre 1995 y 2007, la población femenina nativa en este segmento de edad se redujo en unos 67.000 efectivos (una cifra que contrasta con el avance de 1,7 millones de mujeres del período 1977-1995), en el horizonte de 2023 aparece una reducción cercana a las 700.000 mujeres nativas, lo que representa el 5,5 por ciento de la población potencialmente activa de 2007.

Además, esta caída señala una fuerte acentuación del proceso ya detectado entre 1995 y 2007, ya que la media anual pasará de aquella pérdida de -5.500 mujeres de 16 a 64 años, a los -44.000 que se espera tenga lugar en los próximos años.

Esta contracción tiene unos reflejos territoriales marcadamente distintos. Así, los tresgrandes ámbitos territoriales en los que se ha dividido España mostrarían dinámicas muydispares, con el grueso de la caída concentrada en la España del norte y el oestepeninsular.

Según el informe, en estas zonas se asistirá a una pérdida anual cercana a las -27.000 nativas de 16 a 64 años, con una disminución total muy relevante, de -442.000 mujeres en edad potencialmente activa, lo que significa un -13,5 por ciento de los efectivos de 2007.

A esta pérdida debe sumarse la que tendrá lugar, aunque en menor medida, en lascomunidades de las CCAA del Mediterráneo y Madrid, cuya población femenina de 16 a64 años tiende a reducirse a una tasa anual de -17.000, y contribuye con casi el 38 por ciento a la pérdida agregada. En total, esta región verá disminuir sus efectivos en torno al 4,5 por ciento (unas -271.000 mujeres menos de 16 a b64 años de las existentes en 2007).

Finalmente, en las comunidades de Andalucía, Castilla-La Mancha y Aragón, la población femenina nativa potencialmente activa prácticamente no experimentaría ninguna modificaciónsubstancial en el total de efectivos, no así en su distribución por grupos de edad, deforma que en 2023 el conjunto de las mujeres de 16 a 64 años prácticamente sería elmismo que en 2007.

Con este trasfondo demográfico, y en la hipótesis que la tasa de participación femeninaen el mercado de trabajo de las nativas continúe aumentando con intensidad hastaalcanzar el 70 por ciento para el conjunto de España en 2023, en los próximos 15 años lasmujeres nativas activas sólo aumentarán en escasamente 300.000 personas.

Esto cifra equivaldría a un crecimiento de un 4,2 por ciento acumulado entre 2007 y 2023, que contrasta con la enorme aportación del período anterior, que introdujo en el mercado de trabajo a más de 4 millones de nuevas activas.