PAMPLONA, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
Unas 500 personas se han manifestado este sábado por las calles de Pamplona para rechazar el cierre "inminente" de la empresa Inasa, en Irurtzun, y reclamar al Ejecutivo foral que se "implique" en buscar una "solución" para la planta.
La dirección de Inasa ha decidido cerrar la fábrica de Irurtzun y ha presentado un ERE para la rescisión de 155 de los 168 contratos de la fábrica, mientras que los otros 13 continuarían trabajando un tiempo para las labores propias del cierre de las instalaciones.
La marcha, convocada por el comité de empresa de Inasa, ha partido sobre las 17 horas de la antigua estación de autobuses de la capital navarra encabezada por la pancarta 'Inasak eta Sakana. Etorkizuna nahi dute. (Inasa y Sakana quieren futuro). Gobierno de Navarra solución'.
Los asistentes a la manifestación, que ha terminado en el Paseo de Sarasate, frente al Parlamento de Navarra, han portado carteles contra el cierre de la empresa y han coreado consignas para protestar por la decisión de la dirección y mostrar su rechazo a la reforma laboral.
Antes de partir la manifestación, el presidente del comité de empresa de Inasa, Antonio Ruiz, ha destacado que los trabajadores están "luchando y peleando para que la planta no se cierre" y ha subrayado que están intentando "por todos los medios" que el Gobierno de Navarra les "eche una mano para buscar una solución".
De este modo, el presidente del comité ha reclamado al Ejecutivo foral que "se implique al máximo" y que "intente por todos los medios que la planta no se cierre", si bien ha reconocido que "la cosa está complicada".
En este sentido, ha resaltado que existen dos opciones para que la planta no se termine cerrando, como son buscar un inversor o formar una cooperativa entre los trabajadores. Según ha dicho, están barajando las dos posibilidades, ya que "no sabemos cuál sería la más positiva".
"Si no sale algún socio inversor o algo parecido vamos a tener que negociar los despidos de los trabajadores y las indemnizaciones y eso es lo que no queremos, queremos negociar algo para que la empresa siga adelante", ha comentado Ruiz en declaraciones a los periodistas.
El presidente del comité de empresa ha remarcado además que tanto Irurtzun como la Sakana "viven mucho de Inasa" y ha advertido de que el cierre de la planta va a suponer "un problema serio" para la zona.
No obstante, ha resaltado que los trabajadores continúan "animados", a pesar de llevar ya "38 días de huelga". Según ha indicado, están "con mucha fuerza y muchas ganas" para "seguir luchando contra el cierre de la planta" aunque "en algunos momentos nos desanimemos".
