MADRID, 6 Oct. (Portaltic/EP) -
Microsoft está investigando cómo transformar cualquier habitación en una sala de juegos tridimensional interactiva con su proyecto RoomAlive (Habitación viva, en castellano), que hace uso de proyectores y cámaras Kinect para conseguir una nueva experiencia de juego.
Como norma general, los proyectos de mapas interactivos proyectados sólo pueden ser utilizados en salas preparada a tales efectos ya que necesitan adaptar lo que se muestra a los elementos físicos de la habitación. RoomAlive, al contrario, se puede configurar en cualquier habitación ya que se calibra de forma automática, adaptando las proyecciones al mobiliario.
Para ello, hace uso de lo que Microsoft ha llamado 'procam'. Ésto no es otra cosa que un proyector estándar con una cámara Kinect y una unidad de computación que procesa la información gráfica. Aunque se puede hacer uso RoomAlive con una sola 'procam', para convertir cada centímetro cuadrado de una habitación en un escenario de videojuegos, hacen falta al menos seis de estas cámaras.
Como la calibración de las cámaras es automática, los usuarios sólo tendrán que instalar las 'procams' en el techo y la unidad de procesamiento comenzará a realizar un mapa en tres dimensiones del lugar escogido para jugar y poder situar los elementos del videojuego sobre ellos, independientemente de la forma, el color y el tamaño de los objetos. También, las cámaras se encargarán de seguir el movimiento del jugador para que sus sombras no entorpezcan la partida.
Por el momento, se trata de un prototipo, pero en el vídeo compartido por Microsoft se puede ver cómo es posible jugar tanto de pié como sentado y con la ayuda de periféricos (como mandos o pistolas) en función del videojuego.
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