MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los grupos ecologistas calificaron de "bálsamo" y de "acto publicitario" el anuncio realizado hoy en la inauguración de la Conferencia de Cambio Climático en Barcelona por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, por el que España aportará 100 millones de euros adicionales hasta 2012 con el objetivo de "reforzar los esfuerzos tempranos" en la lucha contra el cambio climático.
Así, para el portavoz de cambio climático de Ecologistas en Acción, Pablo Cotarelo, se trata de "una especie de bálsamo o contrapartida para intentar esconder la falta de anuncios realmente importantes que ha tenido el discurso" de la vicepresidenta.
En ese sentido, criticó la "falta de compromiso" del Ejecutivo para que los países desarrollados puedan proponer en la Conferencia de las Partes que se celebrará el próximo mes de diciembre en Copenhague (Dinamarca) una reducción "realmente ambiciosa" de los gases de efecto invernadero. "No hay nada concreto más allá de la cifra de 100 millones de financiación", aseguró.
"Destaca también la ausencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en un cumbre (la última reunión preparatoria de cara a Copenhague) tan importante. Esto viene a constatar que las declaraciones en los últimos años de que el cambio climático es prioritario, que la ley de economía verde es una forma de salir de la crisis, por lo que éstas no son mas que declaraciones que no tienen nada detrás en lo que sostenerse de manera real", sentenció.
Asimismo, la portavoz de cambio climático de Greenpeace, Raquel Montón, criticó también la ausencia del jefe del Ejecutivo y señaló que, para la organización se trata de "un desplante y una falta de respeto a los gobiernos del mundo". "Su falta de consideración ante las demandas de la comunidad científica es vergonzosa", apostilló.
A su juicio, que De la Vega "sólo" haya hablado en el plenario de compromisos para 2050, es un planteamiento que "está fuera de plazo de lo que la ciencia ha establecido para salvar el planeta" de un cambio climático "peligroso". Igualmente, considera que el Gobierno "evita asumir la responsabilidad" ante la necesidad urgente de actuar en este objetivo.
MÁS AYUDAS AL CARBÓN
Frente a los 1.000 millones de euros anuales para el sector del carbón que el Ejecutivo ha propuesto en los Presupuestos Generales del Estado 2010, a los que se sumarán otros 1.500 millones anuales en primas si se aprueba el decreto presentado por el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, Greepeace critica la "contribución" de 100 millones anunciada por la vicepresidenta para que los países en desarrollo puedan luchar contra el cambio climático.
Por su parte, para el responsable de cambio climático y energía de Amigos de la Tierra, Alejandro González, la cantidad de 100 millones es algo "realmente escaso" que queda lejos de la horquilla de entre 35.000 y 100.000 millones de financiación que la Unión Europea ha estimado como necesarios para transferir a los países en desarrollo con el objetivo de adaptarse y mitigar los efectos del calentamiento global que ellos no han causado.
"Esta reacción parece un acto publicitario insuficiente", opinó González, al tiempo que subrayó que las organizaciones ecologistas vienen denunciando desde el año pasado la "falta de acción del Gobierno en todos los ámbitos, incluido el cambio climático".
Así, para la encargada de la materia en WWF, Mar Asunción, toda financiación adicional es "bienvenida", pero la cifra de 100 millones "no es suficiente". "Se tiene que concretar más y sobre todo asegurar financiación pública para los países en desarrollo y conocer cómo se va a conseguir y cómo se van a fomentar prácticas sostenibles entre los ciudadanos", señaló.
Finalmente, calificó de "mal signo" que el presidente del Gobierno no haya acudido a la cita de Barcelona ya que como mayor representante del Ejecutivo "tenía que estar allí". "Esperábamos que Zapatero quisiera dar, al menos, una imagen. Nos ha apenado y le emplazamos que vaya a Copenhague porque este es un tema que trasciende a la competencia del Estado y que no puede ser una decisión tomada por los ministros de Medio Ambiente", concluyó.
