Braulio Rodríguez arremete contra un diario que publicó "el Papa llama a los príncipes de la Iglesia a la lucha ideológica"
VALLADOLID, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Valladolid, Braulio Rodríguez Plaza, invitó a los fieles a leer el Sacramento de la Caridad escrito por el Papa Benedicto XVI ante la "infamia" cometida por un diario madrileño que publicó que el Pontífice llamó a los "príncipes de la Iglesia a la lucha ideológica y a recuperar el prestigio perdido".
Rodríguez Plaza aseguró, durante su carta pastoral semanal recogida por Europa Press, que tras leer "con detenimiento y con gusto" la exhortación que el Papa escribió después de la celebración del Sínodo de Obispos de 2005, no había encontrado por ninguna parte semejantes afirmaciones, que calificó de "mal gusto y poca categoría".
"¿De dónde habrán extraído que el Papa sostiene que la fuerza del catolicismo no radica en el diálogo ni en la tolerancia, sino en la convicción de que hay cosas innegociables?", se preguntó el arzobispo, quien calificó tales declaraciones de "desfachatez e infamia".
Por este motivo, el prelado invitó a los fieles a no dejarse llevar por semejantes "insidias" y a leer el texto íntegro del 'Sacramentum Caritatis', al que se puede acceder a través de Internet, y que presenta "de un modo accesible al hombre contemporáneo las grandes verdades sobre la fe eucarística", según añadió Rodríguez Plaza.
La exhortación se basa en el nexo inseparable de tres aspectos, como son el misterio eucarístico, la acción litúrgica y el nuevo culto espiritual, explicó el mitrado. El texto está estructurado en tres partes, cada una de las cuales profundiza una de las tres dimensiones de la Eucaristía, es decir, 'Eucaristía, misterio que se ha de creer', 'Eucaristía, misterio que se ha de celebrar' y 'Eucaristía, misterio que se ha de vivir'.
En relación con la primera parte, Rodríguez Plaza destacó el deseo del Papa de que el rito eucarístico se celebre en cada ocasión como "algo siempre nuevo" en vez de repetir sistemáticamente el acto situado en la Última Cena de Jesús.
En la segunda parte se ilustra el desarrollo de la acción litúrgica en la celebración y cómo ésta no es una abstracción, sino que afecta a todos los ámbitos de la vida cristiana, explicó el prelado, lo mismo que sucede en la tercera parte, donde se muestra "la capacidad del misterio creído y celebrado de constituir el horizonte último y definitivo de la existencia cristiana".
