SAN SEBASTIÁN, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 800 personas han participado en la XVII Marcha contra el Racismo y la Xenofobia, impulsada por SOS Racismo, la Coordinadora de ONGD de Guipúzcoa y Medicusmundi Gipuzkoa, y secundada por 58 organizaciones, entidades sociales y sindicatos, que ha demandado la libertad de circulación de todas las personas dentro del espacio europeo.
La marcha, como todos los años, ha recorrido la distancia existente entre Pasaia y San Sebastián con el lema 'Zirkulatu: por una Europa abierta' para reclamar que el nuevo Parlamento Europeo, que saldrá de las elecciones que se celebrarán en mayo, cambie las políticas migratorias existentes, priorice la libertad de desplazamiento en el ámbito de la Unión Europea y luche contra la discriminación de las personas inmigrantes.
La manifestación ha llegado al Boulevard donostiarra alrededor de las 13.00 horas, donde un miembro de SOS Racismo Gipuzkoa ha leído el manifiesto de este año, en el que, entre otros aspectos, se destaca el "nefasto papel que están desempeñando las corrientes populistas de extrema derecha", las cuales "llevan las dificultades por las que atraviesan miles de personas al terreno de una hostilidad de principio hacia la gente trabajadora inmigrante, incrementando la xenofobia y el racismo".
Según las organizaciones participantes en la Marcha, "dichas corrientes y sus partidos políticos afines presentan propuestas para discriminar legalmente a la inmigración en amplios terrenos de la vida social y política como una variable de ajuste económico que favorecería, supuestamente, a la población trabajadora autóctona".
"Convertir en legal la discriminación contra las personas en base a su origen nacional o pertenencia étnica o religiosa es una reclamación profundamente antidemocrática y que no resuelve los problemas sociales existentes en la actualidad", han remarcado.
También han afirmado que es "profundamente antidemocrático" aplicar "una lógica guerrera, militar" en las políticas de gestión de los flujos migratorios que intentan acceder a Europa por el Sur, así como la de convertir en "delincuentes convictos y confesos" a los inmigrantes que llegan a Melilla o Lampedusa.
"Como son profundamente antidemocráticas las propuestas que avanzan algunos gobiernos conservadores europeos, de limitar la libertad de desplazamiento en el ámbito de la Unión Europea para los ciudadanos de la Unión, en función de su procedencia", han añadido.
Por todo ello, han instado a la población en general a rechazar firmemente ese tipo de propuestas, "tanto cuando las formulan neopopulistas de la extrema derecha como cuando lo son por partidos o gobiernos que se congracian con esa corriente".
