ZARAGOZA, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) desarticularon una red de delincuentes dedicada a robar vehículos de alta gama en el extranjero y venderlos en España de forma ilegal, informa la Jefatura Superior de Aragón.
En una nota, indican que el Grupo de Robos de la Brigada Provincial de la Policía Judicial del CNP de Zaragoza detuvo, a lo largo del mes de diciembre, a nueve personas, que constituían una organización criminal.
La investigación comenzó el pasado 8 de diciembre, cuando los agentes detuvieron al propietario de una empresa dedicada a la compraventa de vehículos usados, a quien se le intervino un todoterreno de alta gama que había sido robado el pasado mes de noviembre en un país del Este de Europa.
Pocos días después, el mismo empresario fue nuevamente detenido cuando se disponía a conducir un deportivo 'Porsche Carrera 911', que había sido robado días antes en otro país europeo.
Las pesquisas realizadas permitieron conocer que los dos vehículos habían sido trasladados a España al parecer por integrantes del citado grupo organizado junto con al menos otros dos vehículos y que pudieran encontrarse en Zaragoza.
Así, el día 15 de diciembre fueron identificados, localizados y detenidos siete individuos a quienes se les intervino diversa documentación de automóviles y dinero en efectivo, así como un vehículo 'Mercedes Vito', al parecer sustraído en un país de Europa del Este.
Dos de los detenidos tenían además varias requisitorias policiales por la sustracción en España de otros ocho vehículos, previo alquiler de los mismos.
Horas después, y fruto de las investigaciones realizadas, se localizó un tercer vehículo todo terreno de alta gama que se encontraba estacionado y semioculto en una localidad del municipio de Zaragoza, donde fue detenido otro integrante del grupo, pasando todos los detenidos junto con lo actuado al efecto a disposición de la autoridad judicial.
Con el fin de "colocar" los vehículos sustraídos, estos grupos organizados al parecer se apoderaban de ellos mediante diversos procedimientos que les permitían hacerse también con una llave de arranque y en muchos casos la documentación completa.
Una vez que los vehículos están en el país de destino, eran legalizados como procedentes de la Unión Europea y vendidos a particulares a través de intermediarios profesionales del sector, consiguiendo de este modo que el comprador en nuestro país no sospeche de la ilícita procedencia del vehículo, que es ofertado a precios muy atractivos.
