CÁCERES, 22 Oct. (OTR/PRESS) -
Los ladridos de un perro alertaron hoy a los vecinos de que sus dueños, un matrimonio que residía en la urbanización Montesol, situada a las afueras de Cáceres, estaban muertos. Tras el aviso a los servicios de emergencia y de seguridad, que nada pudieron hacer por las víctimas, la Policía inició una investigación. En este sentido, el jefe superior de la Policía en Extremadura, Ángel Galán, confirmó que, aunque aún se desconocen las causas de las muertes, ambos cadáveres presentan numerosos "signos de violencia".
Galán informó así mismo de que las familias de los fallecidos "ya están informadas" del suceso. Las investigaciones siguen su curso, aunque no "se puede adelantar nada más" por el momento, según apostilló el responsable policial en un encuentro con los periodistas que se concentraban frente a la vivienda.
La promoción de adosados de la que forma parte la vivienda en cuestión fue entregada el pasado verano, por lo que cuenta con pocos vecinos. Además, está situada en una zona 'dormitorio' de la capital cacereña, por lo que no suele haber gente hasta la noche, ya que la mayoría de los que allí residen trabajan en el centro. Águeda, una vecina de la misma calle, informó de que no había oído "nada" y que sólo conoce a un "señor de 50-60 años" al que ha visto bajar y subir de un coche.
