La Infanta Elena preside la misa funeral por las víctimas de Palencia

Actualizado: viernes, 4 mayo 2007 0:24


PALENCIA, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La Infanta Elena de Borbón presidió hoy la misa funeral oficiada por el obispo de Palencia, José Ignacio Munilla, en memoria de las siete víctimas fallecidas y los dos desaparecidos a consecuencia del derrumbamiento de un edificio de cinco plantas en el centro de la capital palentina el pasado martes, 1 de mayo.

La Infanta Elena, vestida de luto, llegó a la Catedral de Palencia acompañada del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera; de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega; del delegado del Gobierno, Miguel Alejo; del presidente de las Cortes, José Manuel Fernández Santiago, y del alcalde de Palencia, Heliodoro Gallego.

Tras ser recibida a las puertas de la Catedral por el obispo de Palencia, la Infanta Elena tomó asiento en un lateral del Altar, donde se encontraban cuatro obispos y una veintena de curas, entre ellos un representante de la Iglesia Ortodoxa ya que una de las dos personas desaparecidas tras el derrumbamiento del edificio, un joven rumano de 24 años, profesa esta religión.

Los familiares de las siete víctimas mortales de este suceso ocuparon los primeros bancos de la seo palentina y durante toda la misa funeral se vivieron momentos de dolor ya que muchos de ellos no pudieron contener las lágrimas.

Durante la Homilía, el obispo de Palencia aseguró que la tragedia vivida en la capital palentina ha servido para demostrar que a los palentinos les importa "el prójimo" y que no viven su proyecto de vida "sustentado en la indiferencia" ya que, según aseveró, "Dios no nos ha creado para hacer el camino en soledad sin para vivir en comunidad".

Asimismo, se preguntó si ante una tragedia como la vivida por la capital palentina "hay razones para la esperanza" a lo que respondió que el mayor enemigo de la esperanza "es el sinsentido" al tiempo que indicó que existe "algo peor que el dolor y la muerte, la falta de sentido" para poder hacer frente a ese dolor y a la muerte.

Al respecto, José Ignacio Munilla aseveró que a pesar de que el dolor y la muerte "puedan dificultar el sentido de la existencia, no impedirán que los signos de Dios lleguen a nosotros" al tiempo que indicó que los cristianos no rezan para no morir "sino para morir bien porque la meta no es la salud física sino la vida eterna".

Al finalizar su Homilía, el obispo quiso tener unas palabras "de especial cariño" para las familias de las víctimas y de los heridos y aseguró que "el afecto y la solidaridad" de la que están rodeados en estos difíciles momentos es prueba "de que el amor es más fuerte que la muerte".

Igualmente quiso agradecer el apoyo de las instituciones y entidades que han colaborado en este suceso así como el "apoyo incondicional" de los palentinos y concluyó al pedir que la solidaridad demostrada estos días "no sea circunstancial y puntual y tenga seguimiento".

Durante las peticiones, hubo palabras para que las víctimas sean acogidas en el Reino de los cielos, para que los heridos se recuperen, para que fructifiquen los esfuerzos para encontrar a los desaparecidos y para que todos los que sufren en el mundo por tragedias naturales similares a la que ha sacudido a Palencia encuentren la ayuda necesaria.

Los cuatro obispos vestían casullas moradas, símbolo del dolor, y portaban mitras blancas, color de la luz y la esperanza.

Al concluir la misa funeral, en la que no estuvieron presentes los féretros ya que alguna de las víctimas ya ha sido enterrada, la Infanta Elena se acercó a dar personalmente el pésame a los familiares, a quienes beso y transmitió palabras de ánimo, al igual que el resto de las autoridades.

El gesto de la Infanta, que abandonó la Catedral sobre las 20.20 horas, fue agradecido por los asistentes con aplausos, mientras miles de personas esperaban a las puertas de la seo palentina la salida de Elena de Borbón.

En los alrededores de la Catedral, la Junta estableció un dispositivo de atención a los familiares con una tienda de campaña con personal médico y equipos de atención psicológica.

Entre los asistentes a la misa funeral se encontraba el secretario regional del PSOE, Ángel Villalba; los consejeros de Sanidad, César Antón, y Fomento, Antonio Silván; el presidente de la Diputación de Palencia, Enrique Martín, miembros de la Corporación Municipal y diputados provinciales.