ROMA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha afirmado que "la Iglesia necesita ministros que hablen con ternura, escuchen sin condenar y acojan con misericordia" en el marco de su discurso a los participantes en el 47º Capítulo General de la Congregación de la Pasión de Jesucristo (Pasionistas), a quienes ha recibido en audiencia este lunes 22 de octubre.
En la Sala del Consistorio del Vaticano, según ha informado la Santa Sede, el Pontífice ha recordado a los participantes el tema de reflexión que ha guiado el Capítulo General de la Congregación: "Estas tres palabras: gratitud, profecía y esperanza expresan el espíritu con el que deseáis estimular a vuestra Congregación para que se renueve en la misión", ha dicho.
"Además de elegir el gobierno del Instituto, os proponéis emprender un nuevo camino de formación permanente para vuestras comunidades, enraizado en la experiencia de la vida diaria; y también queréis discernir la metodología pastoral en el acercamiento a las jóvenes generaciones", ha señalado.
Respecto al fundador de la Congregación, San Pablo de la Cruz, el Papa Francisco ha recordado a los Pasionistas que él quería que sus comunidades fueran "escuelas de oración, donde se pudiera experimentar a Dios". "Os animo a ser ministros de curación espiritual y de reconciliación, tan necesarias en el mundo de hoy, marcado por antiguas y nuevas llagas", ha señalado.
Asimismo, el Pontífice les ha señalado que sus constituciones les llaman a dedicarse "por completo a la 'evangelización y re-evangelización de los pueblos, prefiriendo a los más pobres en los lugares más abandonados' (Const. 70)".
"Vuestra cercanía a las personas, expresada tradicionalmente a través de las misiones populares, la dirección espiritual y el sacramento de la Penitencia, es un precioso testimonio. La Iglesia necesita ministros que hablen con ternura, escuchen sin condenar y reciban con misericordia", ha manifestado el Papa.
Según ha afirmado Francisco, "la Iglesia de hoy siente con fuerza el llamamiento a salir de sí misma e ir a las periferias, tanto geográficas como existenciales". Así, ha subrayado que su "compromiso de abrazar las nuevas fronteras de la misión implica no solo ir a nuevos territorios para llevar el Evangelio, sino también enfrentar los nuevos desafíos" de que presenta este tiempo, "como las migraciones, el secularismo y el mundo digital".
"Esto significa estar presente en aquellas situaciones en que la gente percibe la ausencia de Dios y tratar de estar cerca de aquellos que, de cualquier modo o forma, están sufriendo", ha recalcado el Pontífice en su discurso.
El Obispo de Roma les ha explicado que, "en esta época de cambios, que es más bien un cambio de época", están llamados "a estar atentos a la presencia y la acción del Espíritu Santo, leyendo los signos de los tiempos". "Nuevas situaciones requieren nuevas respuestas", ha apostillado.
"San Pablo de la Cruz fue muy creativo para responder a las necesidades de su tiempo, reconociendo, como dice en la Regla, que 'el amor de Dios es muy ingenioso y no se manifiesta tanto con palabras, como con las obras y los ejemplos de quién ama'(XVI). Una fidelidad creativa a vuestro carisma os permitirá responder a las necesidades de la gente de hoy, permaneciendo cerca del Cristo sufriente para poder llevar su presencia a un mundo que sufre", ha zanjado.
