MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las Mesas del Congreso y Senado, reunidas este martes en sesión conjunta, han aprobado un presupuesto de 15,88 millones de euros para el Defensor del Pueblo en 2019, lo que supone un aumento del 6,8% del presupuesto con respecto a la cuantía del año pasado (un millón más).
En todo caso, esa cifra de 15.889.800 euros para 2019 aprobada en el Presupuesto de las Cortes Generales sólo será efectiva si finalmente se aprueban los Presupuestos Generales del Estado que el Gobierno tiene previsto presentar este mes.
Según detalla la memoria explicativa del presupuesto, a la que ha tenido acceso Europa Press, este "ligero aumento" que se plantea para el año que viene no alcanza las cuantías que la institución registraba hace una década, ya que "el presupuesto de 2009 era de 15.968.400 euros".
CRECEN LOS GASTOS DE PERSONAL POR SUBIDAS PACTADAS
La institución que dirige interinamente Francisco Fernández Marugán justifica el incremento por el aumento de los gastos de Personal, que crecen un 7,1% con respecto al vigente ejercicio, lo que a su vez se debe principalmente al incremento salarial del casi el 2,5% pactado para los empleados públicos, así como para atender a otra subida de sueldo que se produjo en 2018 y que no quedó entonces correspondientemente presupuestada y se tuvo que afrontar con fondos propios.
Concretamente, se incrementa un 4,3% las retribuciones a altos cargos; y un 8,6% las retribuciones a funcionarios; mientras que los gastos de personal laboral-contratados, se mantiene "en la exigua cifra" del año anterior.
La Oficina del Defensor del Pueblo habla también de un aumento, aunque "mínimo", del personal técnico, nuevas contrataciones que explica porque, según denuncia, se ha visto mermado en los últimos años, precisamente, como consecuencia de la reducción de su partida presupuestaria.
PREVISIÓN DE INDEMNIZACIONES POR CESE
También aumenta en un 16,5% el capítulo de transferencias corrientes, en previsión de las pensiones que habrá que abonar al Defensor y a sus adjuntos tras su cese --están en funciones desde julio de 2017--, así como por la concesión de premios y contribuciones a organismos internacionales.
Los gastos de bienes corrientes y servicios --reparaciones, mantenimiento, material-- aumentan un 22,1%, lo que va en paralelo con una bajada de más de un 68% (295.000 euros) de la partida para inversiones reales. El motivo es un cambio de diversos mantenimientos informáticos desde el subconcepto 'Gastos de inversiones de carácter inmaterial', en el que figuraban en el pasado ejercicio, al subconcepto 'Mantenimiento de equipos para procesos de información' y al subconcepto 'Servicios de Telecomunicaciones', que pertenecen al capítulos de gastos y bienes corrientes.
