Rouco Varela advierte de la "oscuridad espiritual que cubre el horizonte" de la juventud

Actualizado: domingo, 12 noviembre 2006 16:00


MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

El cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, presidió hoy en la plaza de Oriente de Madrid la misa de envío de la Misión Joven, ocasión que aprovechó para advertir de la "mucha la oscuridad espiritual que cubre el horizonte intelectual, cultural y humano en el que se mueven nuestros jóvenes en la actual sociedad madrileña".

La eucaristía, concelebrada por los Obispos de Getafe y Alcalá, y por los tres Obispos Auxiliares de Madrid y el Auxiliar de Getafe, además de unos 50 sacerdotes, reunió a unas 6.000 personas, según estimaciones de la Archidiócesis de Madrid.

"Nos duelen los jóvenes de esta gran comunidad humana, por tantos conceptos admirable y dinámica que es Madrid, pero, por tantos otros, dura, difícil y compleja para que sus jóvenes puedan ser capaces de poder enderezar la vida conociendo cuál es y en qué consiste su sentido, dónde se encuentra su meta y en qué dirección hay que caminar para alcanzarla", afirmó Rouco Varela.

En su homilía, el cardenal arzobispo dijo "constatar con frecuencia" cómo "muchos de esos jóvenes, más aún, no pocos de los que cultivan la vida de nuestras comunidades parroquiales y de nuestros colegios católicos, padecen esa situación de duda y vacilación que angustiaba al Apóstol Tomás y que le movía a sincerarse con Jesús, preguntándole: 'Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podremos saber el camino?'".

"LA LUZ SOLAMENTE VENDRÁ DE CRISTO"

Así, llamó la atención sobre "este Madrid de comienzos del Tercer Milenio cosmopolita y abierto a todas las influencias ideológicas, a los estilos de vida más diversos, fascinado por concepciones morales y religiosas las más contradictorias y, muchas veces, las más vacías y absurdas".

En este sentido, Rouco Varela advirtió cómo los jóvenes "oyen propuestas y programas para la configuración juvenil de sus personas y para la edificación de un futuro, engañosamente feliz, en las que la ausencia de Dios, cuando no su negación, resulta clamorosa", lo que le llevó a subrayar que "la luz que disipe todas las tinieblas de la inteligencia, de la voluntad y del corazón, esas tinieblas que hacen imposible el ejercicio noble, verdadero y fecundo de la libertad, solamente vendrá de Cristo".

Dirigiéndose a los jóvenes misioneros, el cardenal arzobispo de Madrid destacó su "acción y compromiso excepcional" para "dar testimonio de su fe y de su experiencia cristiana en los actos de la misión que tendrán lugar dentro y fuera de nuestras iglesias, en los centros educativos donde estudian, forman su personalidad y se desarrollan profesionalmente, y también en aquellos otros donde se curan de sus males físicos o espirituales, y hasta en la misma calle".

Por último, Rouco Varela les animó a "ir con confianza al encuentro de Jesús". "Y, como los nuevos santos, ¡no tengáis miedo de hablar de Él! Pues Cristo es la respuesta verdadera a todas las preguntas sobre el hombre y sobre su destino. Es preciso que vosotros jóvenes os convirtáis en apóstoles de vuestros coetáneos. Sé muy bien que esto no es fácil", concluyó.