Sequía.- El sector turístico de Barcelona ve la falta de agua como una nueva "pifia" estival tras el apagón de julio

Actualizado: sábado, 5 abril 2008 12:49

BARCELONA, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

El sector turístico de Barcelona consideró hoy las posibles restricciones de falta de agua a causa de la sequía como una nueva "pifia" estival tras el apagón eléctrico del julio pasado, el caos en el aeropuerto de El Prat de hace dos veranos por la huelga del personal de handling y también los colapsos en la vía AP-7 de agosto que obligaron a levantar las barreras de los peajes en Tarragona y el Vendrell.

Tanto el Presidente del Consejo de Gremio de Restauración de Barcelona, Gaietà Farràs, como el director de Expansión del Gremio de Hoteleros de Barcelona, Manel Casals, coincidieron en estas impresiones y culparon a las administraciones --tanto las actuales como las anteriores-- de la situación por falta de previsión.

En declaraciones a Europa Press, Farràs criticó que, después de todo el año "tirando del carro" entre empresarios, asociaciones y entidades de turismo para promocionar a Barcelona como ciudad puntera, "las incompetencias políticas de cada verano" hagan que el esfuerzo no haya "servido de nada".

Farràs, quien también es presidente del Consejo de Gremios de Comercio, Servicios y Turismo de Barcelona, puntuó con un "cero patatero" a los diferentes gobiernos, tanto de la Generalitat como del Ejecutivo central, que "no han sido capaces de prevenir" una situación de emergencia por la sequía.

RESTAR COMPETENCIA TURÍSTICA.

Además, lamentó la "indefinición" de las medidas que se emprenderán, y consideró "triste y lamentable" que el Gobierno central niegue medidas como el trasvase del Segre, pero no proponga alternativas. "Si el Gobierno español tiene las competencias, tiene la obligación de explicar cómo resolverá el problema inmediatamente", precisó.

Advirtió de que, pese a que los posibles cortes en el suministro serían después de verano, esto representaría el "cierre" de los restaurantes, ya que sólo dispondrían de una hora como máximo de "vida útil" hasta que se les acabaran las vajillas limpias.

Ante esta afirmación, Farràs evitó considerar las consecuencias que tendría un corte en el suministro, sea cual sea su tipología, y apuntó que existe una "gran preocupación" en el sector porque esta situación pueda llegar.

Así, consideró que medidas, como la aportación de agua en barcos desde Tarragona, Carboneras (Almería) y Marsella el mes próximo, harán "mucho daño" a la imagen de Barcelona, y aseguró que este hecho será "aprovechado por las ciudades que son competencia turística".

DOS AÑOS SIN SOLUCIONES.

Por su parte, el director de Expansión del Gremio de Hoteleros de Barcelona, .Manel Casals, explicó a Europa Press que unos cortes serían "muy duros" para el sector, cuya imagen se vería resentida.

Recordó que, además de tras los episodios de "caos" vividos en pasados veranos, se han dado años con sequías anteriormente. "Hace un par de años la situación no era tan diferente, y de dos años hasta ahora no se ha hecho prácticamente nada", lamentó.

Por ello, consideró que deben hacerse "inversiones para encontrar solución", pero también apuntó que los ciudadanos deben poner su "granito de arena", y señaló que los hoteles, por ejemplo, distribuirán folletos entre sus clientes para que no "desperdicien agua".

Sin embargo, Casals criticó a la administración porque, con sus anuncios de posibles restricciones, juega con el "sufrimiento" de la gente. "No se puede jugar con personas que trabajan todo el año para poder pasar el verano en la casa con piscina y que luego no la puedan llegar", criticó.