Si pasas 12 horas sin beber alcohol y te sientes inquieto, tienes un problema con la bebida

Bebidas alcohólicas. Bourbon. Alcohol.
Foto: JOHN SOMMERS II / REUTERS
   
Actualizado: lunes, 28 abril 2014 19:21

MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

   El alcohol es la droga legal más consumida de España. Tres cuartas partes de españoles toman bebidas alcohólicas en algún momento del año, según datos del ministerio de Sanidad. Pero, ¿Sabes cuáles son sus efectos y sus riesgos para el organismo? ¿Y sabes si estás en riesgo de ser alcohólico?

¿CÓMO SABER SI ESTÁS EN RIESGO DE SER ALCOHÓLICO?

   Alcohólicos Anónimos de España ha elaborado un test para saber si estás en riesgo de ser alcohólico. Se basa en doce preguntas. Si contestas sí a cualquiera de ellas, es el momento de plantearte si tienes problemas con la bebida:

   1.- ¿Bebes porque tienes problemas? ¿Para relajarte?

   2.- ¿Bebes cuando te enojas con otros, con tus amigos o con tus padres?

   3.- ¿Prefieres beber a solas, en lugar de hacerlo con otros?

   4.- ¿Están empezando a bajar tus calificaciones? ¿Eres chapucero en el trabajo?

   5.- Has tratado de dejar de beber o de beber menos y has fracasado?    

   6.- ¿Has empezado a beber por la mañana, antes de la escuela o trabajo?

   7.- ¿Te tragas las bebidas de golpe?

   8.- ¿Has experimentado alguna vez una pérdida de memoria debido a tu forma de beber?

   9.- ¿Mientes acerca de tu forma de beber?

   10.- ¿Te has metido alguna vez en problemas cuando bebes?

   11.- ¿Te emborrachas cuando bebes, aunque no sea esa tu intención?

   12.- ¿Te parece una gran hazaña poder aguantar mucho bebiendo?

EFECTOS Y RIESGOS

   El alcohol es un depresor del sistema nervioso central que actúa bloqueando el funcionamiento del sistema cerebral responsable de controlar las inhibiciones. Según la FAD, produce efectos de muy diversa índole que pueden clasificarse en:

EFECTOS ORGÁNICOS

Champán

1.- Si se consume poco:

     Pasados unos pocos minutos tras la ingesta del alcohol, éste pasa al torrente sanguíneo. Desde esta vía ejerce su acción sobre diversos órganos del cuerpo. Se produce entonces:

   - Sensación inicial de euforia y desinhibición.

   - Estado de somnolencia con visión borrosa.

   - Incoordinación muscular.

   - Aumento del tiempo de respuesta.

   - Disminución de la capacidad de atender y comprender.

   - Fatiga muscular.

Chico con Cerveza

2.- Si se consume mucho:

   - Acidez de estómago, vómitos, diarrea, sed, dolor de cabeza y deshidratación.

   - Si se ha consumido mucha bebida, se puede producir una depresión respiratoria, puede sobrevenir el coma etílico y ocasionalmente la muerte.

3.- Si hay consumo crónico de alcohol puede:

   - Afectar al cerebro (degeneración y atrofia).

   - Al corazón (alteraciones cardíacas).

   - Al hígado (pues el alcoholismo es una de las principales causas de hepatopía que suele manifestarse en forma de hepatitis o cirrosis).

   - Al estómago (gastritis y úlceras), al páncreas y al intestino.

   - Asimismo, el consumo habitual por parte de las mujeres embarazadas pueden dar lugar al llamado síndrome alcohólico- fetal, que se caracteriza por malformaciones, bajo cociente intelectual del bebé, etc.

Alcohol

EFECTOS PSICOLÓGICOS

   - El alcohol afecta a los sentimientos, a la reflexión, la memoria, la atención y al control social.

   - Euforia, alegría, falsa seguridad que puede llevar en ocasiones a realizar conductas temerarias.

   - Falta de coordinación, lentitud de reflejos, vértigo, visión doble y pérdida del equilibrio.

   - Otras alteraciones de los consumidores crónicos de esta droga son la irritabilidad, insomnio y los delirios de celos o de persecución.

   - En los casos más graves de alcoholismo, se manifiesta una encefalopatía con deterioro psicoorgánico.

TOLERANCIA Y DEPENDENCIA

   Según la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), si se consume alcohol de forma repetida, el organismo se adapta a la sustancia y es entonces cuando se produce la tolerancia a la misma, pero sin que eso conlleve necesariamente a la adicción.

   Algunas personas parecen tener tolerancia genética al alcohol, y parece afectarles menos que al resto de personas en sus primeras ingestas. Según la FAD, muchos alcohólicos desarrollan la llamada tolerancia negativa; Es decir, es suficiente una pequeña cantidad de la sustancia para que se vuelvan completamente ebrios.

   Si a una persona alcohólica se le retira la toma de alcohol, suele caer en un síndrome de abstinencia que requiere atención médica. Los síntomas de este síndrome se manifiestan en inquietud, nerviosismo y gran ansiedad (entre las doce y dieciséis horas consecutivas a la privación de la bebida).

   Unas horas después, pueden aparecer calambres musculares, temblores, náuseas, vómitos y una fuerte irritabilidad. Y a partir del segundo día de abstinencia aparece el llamado "delirium tremens". Este síndrome se manifiesta con una clara confusión mental, con aparición de delirios y alucinaciones, y con temblores fuertes. El "delirium tremens" requiere atención sanitaria.

Copa de vino

PREVENCIÓN Y CONSUMO RESPONSABLE

   El hígado tiene una capacidad limitada: metaboliza entre 20 y 30 gramos de alcohol por hora. Mientras tanto, la bebida circula por la sangre dañando al resto de órganos por los que pasa. La Organización Mundial de la Salud ha estipulado la medida base del alcohol a través de la Unidad de Bebida Estándar (UBE). Cada UBE supone entre 8 y 13 gramos de alcohol puro.

   Para prevenir la adicción al alcohol, la OMS recomienda no superar los 30 gramos de alcohol diarios en hombres, y los 20 gramos de alcohol en mujeres.

   La FAD también establece unas líneas rojas para evitar el consumo de riesgo: En una mujer la ingesta está limitada a 3 unidades de bebida al día (una unidad equivale a un vaso de vino o una caña), y para el hombre, en cuatro unidades.