Unas 400 personas asisten al funeral del capitán que presuntamente mató a su mujer y a su hija en Zaragoza

Actualizado: domingo, 15 enero 2006 19:13

ANTEQUERA (MALAGA), 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

Alrededor de 400 personas asistieron esta mañana en la localidad malagueña de Antequera al funeral del capitán del Ejército del Aire Manuel J. Cuadra Herrera, que presuntamente se suicidó el miércoles tras asesinar a su hija y a su mujer en Zaragoza.

El acto se celebró en la iglesia de San Sebastián de Antequera, localidad de donde era natural el militar, y se inició en torno a las 12.,15 horas.

Tras la misa, oficiada por el párroco del barrio, los restos incinerados en Zaragoza de Manuel J. Cuadra Herrera fueron depositados en un panteón de la familia materna León, ubicado en el cementerio municipal.

Durante el desarrollo del acto, algunos familiares intentaron evitar que los periodistas realizaran fotografías de la comitiva fúnebre, a pesar de que se encontraba en plena calle.

Los tres cuerpos sin vida fueron localizados con heridas de arma de fuego en la residencia que ocupaba el capitán en la base aérea de Zaragoza. Al parecer, Manuel Cuadra fue a recoger a la niña al colegio, la condujo a su casa, dentro de la base militar, donde acudió la madre, que pretendía volver al domicilio donde residía junto a la pequeña en la ciudad aragonesa; fue entonces cuando se produjo el suceso, según creen los investigadores.

El personal de guardia de la base aérea que descubrió los cadáveres fue avisado a instancias de una amiga, preocupada por la tardanza de la cabo primero y porque no respondía al teléfono móvil. Finalmente, los cuerpos fueron hallados con impactos de bala del calibre nueve milímetros, probablemente de un arma corta no reglamentaria propiedad del capitán. La investigación está siendo llevada a cabo por el servicio de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Zaragoza.

El capitán estaba destinado en la Escuela de Técnicas de Seguridad y Defensa y la cabo primero en el Escuadrón de Abastecimiento del Grupo de Apoyo de la Base Aérea de Zaragoza. Se habían separado hace unos tres años, pero por razón de su trabajo se veían todos los días en la base.