ALICANTE, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un gimnasio ardió esta madrugada y las llamas afectaron a una carpintería y a una imprenta colindante ubicada en el cruce cruce de las calles Felipe Moya y Gregorio Marayón del municipio alicantino de Elche. Los locales se encontraban ubicados entre dos bloques de viviendas, según informaron en un comunicado fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos.
El fuego se originó probablemente en el 'ring' de entrenamiento del gimnasio, y las llamas afectaron por completo a este local y provocaron daños a los dos próximos, la carpintería y la imprenta. No obstante, las viviendas próximas no resultaron afectadas.
Los bomberos recibieron un aviso sobre las 1.00 horas de hoy del '112 Comunidad Valenciana' que les alertaba del incendio de tres locales en Elche, a la altura del antiguo cuartel de la Guardia Civil.
Como consecuencia, se trasladaron hasta el lugar de los hechos dos vehículos del parque de bomberos de Elche, con el suboficial jefe de área de Baix Vinalopó y el sargento jefe de turno, así como el vehículo Primera Salida y la Autoescalera, con una dotación de un cabo y cuatro bomberos.
También acudieron vehículos Primera Salida del subparque de Crevillent y el de San Vicente, con un cabo y tres bomberos cada uno; el vehículo Primera Salida de Almoradí llegó para hacer retén en el parque en Elche, aunque se retiró posteriormente.
Cuando llegaron los efectivos de bomberos encontraron que, por motivos que se desconocen, se encontraban ardiendo tres locales situados entre dos bloques de viviendas. El acceso al foco del incendio era muy complicado dado que no se podía localizar en cuál de las tres naves había comenzado ni cómo se estaba propagando al resto de inmuebles.
Los bomberos decidieron acceder por los tejados y llegaron al centro de la manzana, desde donde pudieron entrar al gimnasio y descubrir que se había quemado totalmente un 'ring' de entrenamiento, posiblemente desde el cual se fue propagando al resto del local y a los negocios colindantes.
Las viviendas que rodeaban las naves no tuvieron que ser evacuadas; sin embargo, fueron los propios vecinos los que fueron saliendo de sus edificios por temor a la propagación de las llamas, lo que, afortunadamente, los bomberos consiguieron evitar.
El gimnasio quedó totalmente siniestrado y el techo quedó parcialmente derruido. Las llamas no llegaron a afectar demasiado a la imprenta ni a la carpintería, hecho que sí hubiera ocasionado una mayor dificultad en su extinción y hubiera puesto en grave riesgo a todas las casas del entorno.
Los bomberos dieron por controlado el incendio a las 4.30 horas de la mañana, aunque se mantuvo un retén hasta las 6.00 horas para controlar que no se reiniciara el fuego.
