TARRAGONA, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra han detenido a dos narcotraficantes por presuntamente intentar matar a otro en su domicilio de Amposta (Tarragona). La víctima, que resultó herida de consideración, también fue detenida después de salir del hospital y de que se encontraran en su casa varios kilos de droga.
Según informó hoy la policía catalana, el 13 de noviembre dos encapuchados asaltaron en su casa a Rodolfo José M.P., de 30 años y nacionalidad española, en la zona de Can Carrasca. Los agresores dispararon contra él, sin tocarle, le golpearon la cabeza con la culata de una escopeta que habían cogido del armero de la vivienda y le hicieron varios cortes con un machete, sobre todo en los brazos y el cuello.
La víctima explicó después que se hizo el muerto y aprovechó un descuido de los asaltantes para huir hasta un taller cercano, en la carretera N-340, dejando un rastro de sangre tras de sí. Allí, pidió al encargado que lo trasladara al hospital comarcal.
Las gestiones policiales permitieron identificar rápidamente a los supuestos agresores. Al día siguiente fue detenido Francisco G.D., español de 47 años y vecino de Tortosa (Tarragona), cuando salía de una casa suya en Aldover (Tarragona). Rafael D.J., de 39 años y vecino de Camarles (Tarragona), fue arrestado el 28 de noviembre cerca de su domicilio gracias a un dispositivo que evitó su fuga.
Al registrar sus domicilios, se encontró, en la casa del primero, un arma de fuego con cartuchos de fogueo y numerosa munición. En el domicilio del segundo sospechoso se encontraron tres básculas de precisión, varias piezas de hachís, 35 pastillas de éxtasis y una libreta de anotaciones con supuestos pedidos de droga de parte de clientes. También se recuperaron varios cartuchos y dos pasamontañas como los utilizados en el asalto dentro de una bota.
Tras pasar a disposición judicial, ingresaron en prisión por homicidio doloso en grado de tentativa y por un delito contra la salud pública.
A partir de las declaraciones de varios testigos y de los indicios recogidos por los Mossos en el lugar de los hechos y el vehículo de la víctima --que los agresores se llevaron y abandonaron--, los investigadores descubrieron que el móvil podría ser una discusión por drogas.
El juez instructor autorizó el registro del domicilio de la víctima, que confirmó las sospechas iniciales. La vivienda tenía una estancia dedicada íntegramente al pesaje, adulteración y empaquetaje de drogas, con básculas de precisión, una prensa hidráulica, una máquina termoselladora y herramientas. También se hallaron 4,5 kilos de cocaína, 16,5 de hachís, 1,5 de marihuana y más de 60 gramos de metanfetamina, así como cinco kilos de sustancias de corte y un arma de fuego cargada y con el número de serie borrado.
El hombre fue dado de alta el 18 de noviembre, momento en el que fue detenido. Tras pasar a disposición judicial, quedó en libertad con cargos por tráfico de drogas y posesión ilícita de armas.
