Realojan a una pareja de ancianos tras derrumbarse parte de su vivienda en Cáceres por unas obras contiguas

Actualizado: viernes, 8 febrero 2008 12:35

La nieta acababa de salir a la calle para alertar a los albañiles cuando un muro de la casa se desplomó

CÁCERES, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -

La vivienda en la que un matrimonio de ancianos de Cáceres ha residido durante los últimos 40 años se desplomó parcialmente el pasado miércoles, supuestamente, por las obras que una constructora está realizando en la casa contigua, si bien no hubo que lamentar daños personales.

Modesto Rojo, de 83 años de edad, y su nieta, Cecilia González, de 23 años, tuvieron "mucha suerte" y resultaron ilesos tras desplomarse parte de su vivienda. Todo ocurrió justo después de que la joven saliera a alertar a los albañiles de que habían aparecido "nuevas grietas en la pared del salón", mientras el anciano seguía en el interior.

Así, tras escuchar un fuerte estruendo y ver "una gran nube de polvo", Cecilia regresó a la vivienda y pudo ver a su abuelo intentando "sentarse en un sillón", según comentó a Europa Press Televisión. Con la ayuda de los obreros consiguieron despejar el suelo de escombros y salir de la casa, sin tener que lamentar daños mayores, apuntó.

La chica no podía más que pensar en la desgracia que pudo haber provocado el derrumbe del muro, "hubiera sido fatal" si todo hubiera pasado por la noche, pues su abuela duerme en una de las habitaciones afectadas. De momento, los dos ancianos se encuentran "muy disgustados" tras ver hecha una ruina su vivienda.

Los hechos ocurrieron hacia las once de la mañana del miércoles, cuando, al parecer, los trabajos de "una excavadora dañaron los cimientos de casa" y causaron el desplome de uno de los muros laterales de la vivienda, que ha dejado dos dormitorios al descubierto.

REALOJADOS POR LA CONSTRUCTORA.

Cecilia aseguró que ya habían advertido en varias ocasiones a los obreros de la existencia de "numerosas grietas" en la pared, por lo que consideró que la constructora debería haber tomado medidas de seguridad; como "apuntalar el muro" o trasladar a sus abuelos a otra vivienda, hasta que concluyeran las obras.

No obstante, aseguró que el constructor "se está portando muy bien" tras lo ocurrido, ya que se personó, inmediatamente, en el lugar tras los sucedido y les ha ofrecido un piso para realojarse, hasta que concluyan las reparaciones.

Por su parte, el gerente de la empresa constructora, Florentino Jiménez Nevado, quién rehusó aparecer ante las cámaras, explicó por teléfono que se ha preocupado en todo momento por la familia y que tras desescombrar la casa procederán a su rehabilitación, la cual esperan que esté concluida en un mes.