El funeral se celebrará mañana en la Iglesia de El Carmelo del barrio bilbaíno de Santutxu
BILBAO, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los tres detenidos por el asesinato de Gaizka Etxebarria, dos varones y una mujer de entre 19 y 21 años, permanecen en dependencias de la Ertzaintza a la espera de cumplimentar las diligencias policiales pertinentes para ponerles, posteriormente, a disposición judicial, según informó a Europa Press la Policía autonómica.
Por su parte, la familia de la víctima señaló que el funeral del joven de 30 años -que desapareció el pasado 11 de noviembre y cuyos restos fueron localizados ayer en un monte de la localidad vizcaína de Sopuerta- se celebrará mañana a las doce y media del mediodía en la Iglesia de El Carmelo del barrio bilbaíno de Santutxu.
El cadáver se encontraba enterrado en una zona de monte del barrio San Cristóbal de Sopuerta, maniatado, y presentaba cuatro impactos de bala en la cabeza y numerosas heridas de arma blanca, alrededor de una veintena, en la espalda.
La tres personas detenidas en relación con su muerte son Hatim M., marroquí de 20 años, a quien Gaizka pensaba vender por 27.000 euros un coche BMW en el municipio vizcaíno el día en el que desapareció, su novia de 19 años y un tercer joven de 21 años.
La investigaciones apuntan a que los hechos se iniciaron en la tarde del pasado 11 de noviembre cuando Gaizka Etxebarria se dirigió en su vehículo a Sopuerta, acompañado por dos personas que viajaban en otro automóvil. Antes de desaparecer, éste llamó a su mujer, Itziar, para comunicarle que regresaría pronto a su domicilio de Bilbao.
Al no aparecer, su pareja presentó una denuncia al día siguiente ante la Ertzaintza y las indagaciones se centraron fundamentalmente en las personas que habían acompañado al desaparecido hasta la localidad vizcaína para efectuar la venta del vehículo.
En un principio, éstos señalaron que el motivo del viaje había sido la intención del desaparecido de venderles su vehículo, habiéndose cerrado el trato por importe de 27.000 euros, que le habían abonado en efectivo, tras lo cual, según ellos, no habían vuelto a saber nada más de él.
Durante el interrogatorio, tanto el supuesto comprador como el otro joven, defendieron reiteradamente esta versión, pero fueron incurriendo en diferentes contradicciones. Además, sus testimonios no concordaban con otros facilitados por allegados a la víctima.
Por otra parte, las pesquisas permitieron averiguar que el vehículo en el que las dos personas habían acompañado al desaparecido hasta Sopuerta había sido robado poco antes. Dicho automóvil fue encontrado al día siguiente de la desaparición totalmente calcinado en un paraje cercano.
Ante éstos y otros indicios, en la madrugada de ayer los dos sospechosos junto con una tercera persona, la novia del supuesto comprador, fueron arrestados por su presunta implicación en la desaparición y posible asesinato del vecino de Bilbao.
LOCALIZACION DEL CADAVER
Posteriormente, a primeras horas de la mañana, agentes de la Ertzaintza, ayudados de perros rastreadores, localizaron el cadáver del desaparecido enterrado en una zona de monte del barrio San Cristóbal de Sopuerta.
El cuerpo se encontraba a casi un metro de profundidad del suelo, atado, con varios impactos de bala en la cabeza y más de una veintena de heridas de arma blanca en la espalda. Una vez realizado el levantamiento del cadáver, éste fue trasladado al depósito forense para la práctica de la correspondiente autopsia.
La hipótesis que barajan los investigadores de la Ertzaintza se centra en que el asesinado habría acompañado a los dos varones detenidos hasta Sopuerta posiblemente para cerrar la venta de su vehículo, pero también para solventar una supuesta deuda económica que uno de ellos mantenía con él, asegurándole que procedería a abonársela en este municipio, donde residía.
Sin embargo, una vez allí, los dos jóvenes le habrían reducido y maniatado para después asesinarle de varios de disparos de arma de fuego en la cabeza, asestándole posteriormente más de una veintena de cuchilladas en la espalda. Luego, habrían trasladado el cuerpo en el vehículo sustraído hasta el monte para enterrarlo, prendiendo fuego al coche para hacer desaparecer cualquier evidencia del delito.
El autor material de los disparos se habría quedado, además, con el vehículo del fallecido y con su documentación personal para proceder a realizar la transferencia del mismo a su nombre. Los tres detenidos serán puestos por la Ertzaintza a disposición judicial una vez cumplimentadas las correspondientes diligencias.
